El presidente tenía su respuesta muy preparada. Quería salir en defensa de la Guardia Civil, pero también sacar los colores al Partido Socialista y recordarle su gestión en materia de inmigración cuando estaba en el Gobierno. En la Moncloa están indignados por la "campaña brutal" del principal partido de la oposición "sobre un asunto de Estado". “Están pensando más en las elecciones que en España”, se quejaba un ministro.
En el Senado, Mariano Rajoy rompió su silencio con la presión mediática y de la oposición en máximos. A preguntas de Marcelino Iglesias (PSOE), el jefe del Ejecutivo mostró su pesar por las muertes de inmigrantes en Ceuta para, a renglón seguido, dar la cara por la benemérita.
"Quieren hacer a la Guardia Civil sospechosa de no sé qué comportamientos y yo me niego totalmente", afirmó, sirviéndose de unas palabras pronunciadas por un "ilustre" dirigente socialista cuando en 2005 fallecieron dos personas al tratar de saltar la valla de la ciudad fronteriza. Mientras, Iglesias insistía y no se daba por satisfecho: "¿Quién dio la orden de disparar?”, le repitió, mientras la bronca parlamentaria crecía.
La cita completa, del socialista Antonio Hernando, utilizada por el presidente es la siguiente: "Hay un dicho callejero que se utiliza mucho en México y es que cuando en este país hay algún sospechoso es la policía; Pues bien, parece que en estos últimos tiempos parece ser que hay determinados sectores que quieren hacer a la Guardia Civil sospechosa de no sé qué comportamientos y yo me niego totalmente".
En este sentido, Rajoy, que no desveló al autor, recalcó que ahora pasa "exactamente lo mismo" que en 2005. Iglesias le replicó que no se estaba quejando de las fuerzas de seguridad "porque sé que cuando dispara es porque alguien ha dado la orden". Si bien, el presidente ya no añadió nada más y se centró en hacer un balance de los dos años de legislatura.