Ante el plantón de María Dolores de Cospedal -que por primera vez al término de un Comité Ejecutivo no compareció en rueda de prensa-, fue Carlos Floriano el encargado de dar la cara ante el cúmulo de informaciones sobre Luis Bárcenas y la supuesta contabilidad ilegal de la formación. "Yo no sé nada de eso", llegó a responder el portavoz de Génova, que evitó saltarse el guión establecido sobre esta cuestión.
La estrategia desde hace meses es recalcar el respeto a las decisiones judiciales y asegurar que el partido está haciendo todo lo posible para colaborar con el magistrado Pablo Ruz. "El PP ha entregado al juez toda la documentación que se le ha requerido" y "tiene intención de colaborar hasta las últimas consecuencias", afirmó Floriano, que además de número tres del partido es también el responsable de la campaña electoral.
Sobre el informe de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef), en el que se vincula las donaciones al PP con campañas electorales, Floriano echó balones fuera: "Lo único que quiero es que se aclare la situación y que los responsables asuman su responsabilidad como cualquier otro ciudadano", dijo en rueda de prensa en la sede nacional.
Más seco se mostró cuando salió a colación la última declaración judicial del extesorero de la formación. "Yo no sé nada de eso", cortó cuando se le interrogó sobre las supuestas cajas B en las distintas estructuras del PP. "No sé que hubiera nada de eso", remató.
Por último, instó al Partido Socialista que "no ensucie la campaña" utilizando las acusaciones de Bárcenas. "No aporta nada que nos reprochemos cosas", llegó a advertir, al tiempo que pidió que se espere a las decisiones judiciales. "Conviene no precipitarse", zanjó.