En una entrevista este domingo en La Vanguardia, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, señala que "hay que abrir un diálogo para llegar a un pacto y después someterlo a consulta de los catalanes", pero advierte que "ni la recuperación ni más financiación resolverán la cuestión catalana".
Sin salirse un ápice de su discurso habitual y tratando de mantener la equidistancia, Duran apuesta en su entrevista con el director de La Vanguardia, Màrius Carol, por la llamada tercera vía, es decir por "una respuesta del Estado que permita sentarse a dialogar, acordar, pactar y someter el pacto a referéndum en Cataluña". En cambio, según se desprende de sus respuestas son muchos los condicionantes que pone en su discurso.
En primer lugar no renuncia a la posibilidad de que no exista una consulta, aunque señala que si ésta es para una "declaración unilateral de independencia", el político no la apoyará. En cualquier caso, considera que la consulta ha de ser porque de lo contrario se humillaría a Artur Mas y eso es "inaceptable", dice Duran.
En cambio trata de restar importancia a la fuerza y el protagonismo que se le ha otorgado a la Asamblea Nacional Catalana que capitanea Carme Forcadell. Se pregunta "¿Quién es ella para decir que aceptará o no elecciones y cuándo? La única asamblea nacional de Cataluña con legitimidad democrática es el Parlament", señala.
En cuanto a la posibilidad de aboradar una reforma constitucional, Durán tampoco cree que sea el camino porque hasta ahora se han planteado reformas amplias y en su opinión, ésta tendría que ser "muy quirúrgica, de tres o cuatro puntos, e incluir una disposición adicional que reconozca la especificidad de Cataluña y permita la soberanía en aspectos como la lengua, la cultura y el sistema educativo".
Otro de los aspectos más llamativos del desafío catalán es su enconado empeño en llevar la contraria a Bruselas. Así, tantas veces Bruselas deja claro que una Cataluña separada de España quedaría fuera de la UE, otras tantas Artur Mas y los suyos tratan de convencer de lo contrario. Según Duran, la explicación es que "oficialmente, para la UE es un debate interno del Estado español. Pero sé que en privado y de forma discreta hay dirigentes que ya han dicho y le dirán a Rajoy que se tiene que buscar una solución". Tal y como lo ve Duran, "Jurídicamente, un Estado que se crea nuevo fruto de una secesión de otro tiene que pedir el ingreso en los organismos internacionales."
Por este motivo, se queja de que "a nivel de la UE, la respuesta jurídica de los tratados de la UE no nos es precisamente favorable". La solución pasa por interpretar el asunto "más allá de los tratados", donde "hay una realidad política que no podemos obviar". Los estados de la UE no están dispuestos a alterar el modelo de construcción y equilibrio político europeo. Para ellos, abrir la puerta a Cataluña sería un antecedente problemático para Francia, Italia, Alemania".
El líder democristiano opina que se debe evitar la vía de las elecciones plebiscitarias, porque esta opción sería "la muestra inequívoca de un fracaso, de un fracaso de todos" y señala que "no lo apoyaré".
Por otro lado, respecto a la actitud de los partidos nacionales, se siente más cercano de Rubalcaba ya que al menos, según piensa Duran, el líder socialista pide diálogo. "A diferencia de Rubalcaba", sigue Duran, "Rajoy no reconoce que hay un problema".
Otro de los aspectos que no logrará apaciguar a los nacionalistas catalanes es el dinero. O al menos eso es lo que aseguran. Según el secretario general de CIU , "No nos engañemos, ni la recuperación ni más financiación solucionarán la cuestión catalana".