Los responsables de Sociedad Civil Catalana (SCC) llegaron a la Moncloa con la intención de explicarle a Mariano Rajoy la gravedad de la situación en Cataluña. Sin medias tintas. Y, tras cerca de dos horas de conversación en privado, dijeron estar "más tranquilos" por el "conocimiento" que tiene el presidente sobre la difícil coyuntura. "El Gobierno hará cumplir las leyes, no hay otra opción", resumió José Rosiñol, el vicepresidente de la asociación y tesorero, ante los micrófonos de esRadio.
La receta de SCC es clara: para desactivar la consulta hay que "fomentar" el proyecto común. Y, para ello, es necesario mucha pedagogía y contrarrestar las mentiras del nacionalismo. "Hay que hacer más integrador y atractivo" dicho proyecto, resumió Joaquín Coll, también vicepresidente portavoz, al término del despacho en una rueda de prensa celebrada en la sede del Gobierno. "El envite es en serio", advirtió tras leer una declaración en castellano y catalán. En el encuentro también estuvo el presidente de SCC, Josep Ramón Bosch.
Coll se mostró radicalmente en contra de los discursos que crean "división" y siembran "discordia". "La consulta de secesión es en sí misma perjudicial", destacó. Partiendo de la base de que la consulta es ilegal y no se ha de realizar, exigió que los problemas planteados -desde la financiación hasta las cuestiones lingüísticas- sean "objetivados y tratados con rigor", informa EFE.
Por su parte, si algo quiso dejar claro Rosiñol en Es la tarde de Dieter es que el Gobierno tiene muy claro que la consulta no es una opción. Si bien, no quiso aventurar la hoja de ruta de Rajoy en caso de que Artur Mas siga haciendo oídos sordos y opte por romper las reglas de juego. "Hasta ese punto no puedo decírselo", fueron sus palabras, aunque desde el Ejecutivo se desliza que han barajado todas las hipótesis y se tomarán las decisiones "que sean necesarias".
De momento, sigue sin confirmarse la fecha de la reunión entre Rajoy y Mas aunque fuentes del gabinete precisaron que será "pública" -a diferencia de en otras ocasiones- y en Madrid. Mientras SCC aprovechó para reclamar a Pedro Sánchez, el nuevo líder socialista, un encuentro "para darle nuestro punto de vista".