El anuncio lo acaba de realizar el líder del PSOE en un desayuno informativo. Pedro Sánchez obligará a todos sus diputados y senadores a que "se dediquen en exclusividad a sus tareas de representación política".
Lo hará a través de una iniciativa parlamentaria para ampliar el régimen de incompatibilidades con objeto de "evitar que los representantes de los ciudadanos desarrollen otras actividades privadas que no tienen que ver con sus responsabilidades políticas y parlamentarias".
En el caso de las tertulias televisivas, sí podrán asistir, pero "no podrán percibir remuneraciones", dijo Pedro Sánchez sin aportar novedad alguna porque los parlamentarios ya no perciben en la actualidad remuneraciones por sus colaboraciones en medios de comunicación. No se puede, dijo Sánchez, "dedicarse a sus negocios en sus días libres y mucho menos, ser diputado en sus ratos libres".
La segunda novedad sí fue en relación a las exigencias para tomar posesión de su escaño. Les exigirá además una declaración de Hacienda que acredite no tener deudas con el fisco antes de tomar posesión.