Carme Forcadell, presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Muriel Casals, de Òmnium Cultural, recibirán este jueves de manos del alcalde nacionalista de Barcelona, Xavier Trias, el premio a la mujer trabajadora, que en la versión muncipal se denomina "Premio 8 de Marzo Maria Aurèlia Capmany", destinado a reconocer a las personas distinguidas por sus esfuerzos en pos de la igualdad de derechos y la equiparación salarial.
Los galardones del Ayuntamiento de Barcelona para el 8 de marzo, "Día internacional de la Mujer Trabajadora y la igualdad salarial", son a juicio del PP de Barcelona, que dirige Alberto Fernández, una muestra más del sesgo separatista del Ayuntamiento, "la politización de unos premios que se entregan desde 1987", según sus palabras.
En opinión del líder del PP de Barcelona, Carme Forcadell y Muriel Casals, "no tienen nada que ver con la temática escogida -la igualdad salarial- ni con la celebración del Día Internacional de la Mujer". Ante la opacidad del ayuntamiento convergente sobre los criterios para la concesión del premio, Fernández ha reclamado a Trias que informe de "las directrices para otorgar este premio y qué recursos económicos, logísticos o de publicidad ofrecen".
Tanto la ANC como Òmnium Cultural están en sus horas más bajas, con el proceso separatista en fase estacionaria, por lo que el PP considera que Convergència utiliza la ocasión para insuflar ánimos en las bases separatistas y relanzar las imágenes de Forcadell y Casals. La primera dejará en breve de ser presidenta de la ANC y se baraja su inclusión en la lista de Mas para las próximas elecciones autonómicas, a pesar de que es militante de ERC. La ANC también debate en las últimas semanas la posibilidad de organizarse como partido y presentarse a esos comicios.
Forcadell llegó a declarar hace unos meses que dedicaba a la ANC catorce horas al día los siete días de la semana lo que dio pie a ciertas chanzas, pues además es comisaria lingüística del departamento de Enseñanza de la Generalidad.