Son las primeras elecciones a las que se enfrenta el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y su oportunidad para consolidar su liderazgo antes de que se celebren las primarias de julio. El escenario le sonríe tras 8 meses de estreno a salto de mata, la ruptura con Susana Díaz, la destitución de Tomas Gómez y las amenazas de los críticos, desde que pisó Ferraz con dinamitar a Pedro Sánchez en función de la magnitud del batacazo el 24 de mayo.
La dirección ha sostenido desde el principio que esta debacle "no se va a producir" y la realidad demoscópica del CIS confirma, según fuentes socialistas, que es cada vez más improbable. En consecuencia, es también más remota la posibilidad de que Susana Díaz de el salto a Madrid, a tenor de la "debilidad manifiesta" de la presidenta en funciones de la Junta que todavía no consigue serlo.
Hay un punto de alivio en la dirección federal porque "Susana Díaz pierde enteros" mientras Sánchez los gana de cara a las primarias. Son muchos, cada vez más fuera de Ferraz, los que se desdicen al apuntarse ahora al carro de que "Pedro será el único candidato en las primarias" y el próximo candidato a la presidencia del Gobierno.
Pero más revelador es lo que comentan sobre la baronesa Susana Díaz: "está quemada. Ha perdido toda la fuerza que tenía para lanzar a un tercero en las primarias".
Posibilidad en la que se ubicaba a la eterna candidata Carmen Chacón, muy próxima a Díaz, e incluso, a Eduardo Madina. Pero su 'error estrátegico' al adelantar las elecciones andaluzas han desinflado al personaje de la mujer que más mandaba en el PSOE.
Sánchez y Díaz no coincidirán en ningún mitin en toda la campaña electoral, a pesar de la destacada presencia que tendrá el líder del PSOE en Andalucía, frente a los dos ecasos actos en los que compartieron cartel en la campaña andaluza. Este viernes, la negativa del parlamento andaluz a la investidura de Díaz no ha ocupado ni una sola línea en el discurso del secretario general desde Cantabria, aunque aparentemente se guardaban las formas en otro formato. En un tuit, el líder del PSOE mandaba "un abrazo al pueblo andaluz. Pese a coaliciones en negativo, Andalucía tendrá pronto un Gobierno socialista con Susana Díaz". Lo que tenía que decir que contrasta con lo que se dice en privado en el PSOE.
En el mitin de la tarde, si hablaba Sánchez de Andalucía pero de puntillas. Tras haber hecho suya Rajoy la victoria de David Cameron, Sánchez recogió el guante de la comparación al decir: "A falta de méritos propios , Rajoy pretende hacerse con el mérito ajeno. La última, ¿sabéis cual ha sido? hacer suya la victoria de Cameron en el Reino Unido . Nada que ver, Don Mariano, en el Reino Unido un gobierno qe amnistia a personas como Rato y Bárcenas hubiese dimitido al día siguiente. Nada que ver Don Mariano. En el Reino Unido quien pierde las elecciones dimite, en Andalucía se queda para bloquear la formación de un Gobierno socialista".
