"Aquí crecían tres cipreses. Unos cobardes los cortaron una noche. Quieren imponer el pensamiento único en Cataluña", dice el cartel que Albert Boadella ha colocado en su casa del Ampurdán (Gerona) para denunciar los ataques que viene sufriendo su propiedad desde hace un año.
Boadella tiene una casa en el pueblo de Jafre, donde recibe habitualmente agresiones desde hace un año, según el propio dramaturgo, fundador de Els Joglars, y director de los Teatros del Canal. "Me han roto las chumberas, me han tirado basura dentro de la casa, y lo último ha sido cortarme tres cipreses y metérmelos dentro del jardín", se queja Boadella.
Su casa, explica, tiene un jardín con muro y una parte de campo, sin vallar y esa es la parte "con la que se están cebando", siempre en coincidencia, dice, con sus "declaraciones políticas", muy críticas con el nacionalismo y el separatismo catalán.
Jafre, recuerda Boadella, es uno de los municipios gerundenses por la independencia de Cataluña. En coincidencia con el estreno de su primera ópera, Don Carlo, Boadella ha estado ausente de su casa cinco semanas y cuando volvió se encontró con los árboles talados, unos hechos que denunció ante la policía.
Escribió a la alcaldesa del pueblo, Nuria Berga Ferrer, pidiéndole una reunión pero no ha recibido respuesta, y ahora ha decidido colocar "un inmenso cartel" que pueden ver todos los que entran en el pueblo.