El líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, fue el invitado de Ana Pastor este domingo en El Objetivo de La Sexta. La presentadora interrogó durante media hora al líder comunista por el pacto con Podemos de cara a las próximas elecciones y las contradicciones que ha tenido que "aceptar" la coalición. En cambio, dejó el asunto de Venezuela para los últimos cinco minutos, según dio a entender, para evitar que le criticaran por "instrumentalizar" la crisis en Venezuela.
Según Garzón, Nicolás Maduro está "sufriendo muchas consecuencias, como los problemas económicos que ha tenido por no saber gestionar una crisis que tiene mucho que ver con la bajada del petróleo". Además, considera que Maduro también ha sufrido y sufre "una oposición que no es de carácter democrático".
Para el líder comunista, el demócrata es Maduro y no la oposición en Venezuela, a quien considera golpista. Por este motivo, Ana Pastor terminaba preguntando por el caso de Leopoldo López, y si estaba de acuerdo en que estuviera encarcelado por oponerse al régimen chavista. Garzón contestaba: "Depende. Si hay alguien que es un golpista, que está diciendo o insinuando que los militares tienen que dar un golpe de Estado, evidentemente, ése, en cualquier país, estaría en la cárcel".
Ante la insistencia de Pastor, Garzón repetía que "tenemos que examinar el proceso de este señor, y este señor -Leopoldo López- estaba fomentando golpes de estado". Por este motivo, Garzón se muestra encantado de que se haya procesado a Leopoldo López. Eso sí, terminaba pidiendo que este proceso sea garantista y se respeten sus "derechos humanos".
No le dio tiempo a Pastor de preguntar a Garzón por si entendía por derechos humanos, por poner un ejemplo, los abusos a los que son sometidas la esposa y la madre de Leopoldo López cada vez que van a visitarle a la cárcel. En cualquier caso, sería para Garzón algo secundario porque, como se quejó, "aquí lo que está pasando es que se está instrumentalizando un país como Venezuela".