Se cumple una semana del estallido de los disturbios en el barrio barcelonés de Gràcia y ni uno de los responsables ha sido detenido. En declaraciones a esRadio, los Mossos d’Esquadra han intentado justificarlo asegurando que "si no se han llevado a cabo arrestos es porque lo primero es garantizar la seguridad". Lo ha dicho el portavoz del sindicato de los Mossos SAP-FEPOL, Valentí Anadón, que ha afirmado que "primero hay que apagar el incendio para minimizar los daños que se producen", pero que "nadie se engañe", ha añadido poco después, porque la investigación está muy avanzada y en un plazo breve de tiempo empezarán a caer los responsables.
Instigadores de los destrozos que según ha afirmado Anadón no son vecinos del barrio. "Algunos son de Italia, de Chile" o activistas de otras zonas de Barcelona. Entre ellos también estarían concejales de la CUP, como Josep Garganté, que la última noche de protesta recibió un golpe de porra de uno de los Mossos y que, según el portavoz del cuerpo, la imagen sospechosamente se empezó a difundir a los pocos segundos en las redes sociales: "Antes de que se produjera la carga policial se advirtió por megafonía, diría yo que el señor regidor estaba esperando que los hechos se produjeran de esa manera, por eso no es casual que a los 5 minutos la foto estuviera en todos los medios".
Responde a una vieja estrategia de comunicación, "Pallywood que se puso en marcha a partir del año 2.000 en la segunda intifada en Oriente Medio" ha explicado Valentí Anadón que se basa en buscar la imagen positiva. Y aquí es donde entra el uso de los niños e incluso de personas mayores por parte de los violentos. El portavoz del sindicato de Mossos ha asegurando que el objetivo es "generar imágenes amables por parte de los activistas para contraponerlas con una supuesta actuación excesiva o brutal por parte de las fuerzas policiales".
Y ahí es donde entra la figura de los menores, según Anadón. "En el caso de Gràcia, consiste en montar una zona en la que se improvisa una pequeña guardería al aire libre, a través de las redes sociales se alienta a las personas que vienen a manifestarse legítimamente a que traigan a niños y los dejen aquí". Es en ese momento cuando los violentos aprovechan para "hacer la foto" y en cuanto la tienen "retiran a los niños, empiezan los linchamientos y la provocación porque ya han cumplido su objetivo". Valentí ha querido dejar claro en esRadio que "no estamos acusando de usar a los niños como escudo humano, eso sería una barbaridad, además cualquier policía que esté actuando se dejaría cortar un brazo antes que consentir que un niño se hiciera daño".
El portavoz del sindicato de Mossos también ha negado que exista enfado entre los vecinos por la continua presencia policial en el barrio. "Nos llegan mensajes que nos dicen que les tranquiliza que estemos aquí, porque al que más afecta es al trabajador al que le han quemado su coche o su puesto de trabajo" ha concluido.