Ha sido la anécdota del segundo Consejo de Ministros en el que Íñigo Méndez de Vigo ha ejercido de Portavoz del Gobierno. Le tocaba al también titular de Educación y Cultura contestar las preguntas de los periodistas y trasladar las decisiones del Consejo sobre los nuevos nombramientos en las carteras de Hacienda y Economía.
"Nunca supe que iba a ser ministro de Educación", comenzaba diciendo Méndez de Vigo para, a continuación, confesar que "mi caligrafía no es la mejor" y advertir de que iba a "tratar de desentrañarla".
Fue entonces cuando dio los nuevos nombres, Álberto Nadal, José Enrique Fernández Moya, Elena Collado, Irene Garrido y Matilde Asián. Pero Méndez de Vigo no quedó contento con su trabajo y advirtió a los periodistas: "Es posible que contenga algún error, o que no sea del todo correcto. Les rogaría que comprueben la información en la referencia del Consejo de Ministros. Compruébenlo porque lo he tomado rápidamente a mano y no estoy seguro de no equivocarme".
Conseguir leer las notas tomadas a mano también le ha costado a otros políticos. Fue precisamente el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien confesó en una entrevista con Pedro J. Ramírez en 2011, que no entendía su letra cuando trataba de contestar una pregunta de una espectadora.