Ha sido, sin duda, una de las ruedas de prensa más complicadas para la portavoz del gobierno separatista de los últimos meses. Neus Munté ha intentado esquivar al máximo referirse a la maniobra de la Generalidad para evitar la acusación a CDC pero, ante la insistencia de los periodistas en la rueda de prensa tras el Consejo Ejecutivo habitual de los martes, la también consejera de Presidencia catalana no ha tenido más remedio que responder.
Y su postura ha sido la esperada: La Generalidad no moverá ni una coma en su estrategia de evitar manchar, aún más, a la difunta marca de Convergencia Democrática de Cataluña a escasas horas de que conozcamos las conclusiones definitivas del juicio por el caso Palau. Esto significa que la entidad musical seguirá sin acusar al partido de Artur Mas durante los años investigados por el presunto cobro de comisiones de Ferrovial a cambio de obra pública a través del Palau.
Y no lo harán, ha venido a decir Neus Munté, porque no lo consideran relevante. "Esperaremos a conocer la sentencia"es lo que ha dicho Munté que ha prometido que harán "todo lo posible para recuperar el dinero, hasta el último euro" pero nada sobre retirar la acusación. Munté se ha quedado en la promesa de que el Gobierno separatista se opone firmemente a rebajar las penas ofrecidas por la Fiscalía a los tres principales acusados en el caso, a Felix Millet, Jordi Montull y a la hija de éste.
Negativa también de la portavoz separatista a convocar una nueva reunión del Consorcio del Palau tal y como pide la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, después de que en la del pasado viernes, y por la ausencia de los dos representantes del Ministerio de Cultura, la estrategia del presidente Carles Puigdemont pudiera salir adelante. Munté no solo ha afeado la petición de la alcaldesa, que lo ha hecho vía carta, sino que le ha recriminado que ella, como vicepresidenta del Consorcio, también tiene pleno poder para convocarla. "Las cosas no se hacen de esta manera" ha afeado a Colau a la que ha acusado de "falta de transparencia y honestidad".
ERC y la CUP piden a Puigdemont que rectifique
Lo que tampoco ha podido negar, aunque lo ha intentado la portavoz separatista, es la nueva crisis abierta entre los socios del PDeCAT y ERC a cuenta de la postura de la Generalidad en este asunto. Munté ha reconocido que "existen diferencias de criterio que son legítimas" pero ha esquivado entrar en el fondo del enfado entre la formación de Puigdemont y la de su vicepresidente Oriol Junqueras al que todos los partidos ven deslegitimado para dar lecciones de transparencia mientras sigue gobernando junto a un partido que oculta constantemente sus prácticas corruptas.
Por eso, en ERC se han visto obligados a salir en público a pedirle al presidente Carles Puigdemont que llegue hasta el fondo de la cuestión para esclarecer cuanto antes el papel de CDC en los años investigados en el caso Palau. Es más, el portavoz de ERC, Sergi Sabriá, ha pedido al partido del presidente catalán que "corrija su posición" y demande si es necesario a CDC por su papel en el saqueo del Palau de la Música catalán.
Los radicales de la CUP, por su parte, han puesto sobre la mesa que el pleno del Parlamento someta a votación este mismo miércoles si la Generalidad debe personarse como acusación contra Convergencia en el caso Palau. Lo ha pedido el diputado antisistema Benet Salellas que ha dicho que "no hay mayoría en este Parlamento que avale la vergüenza que está teniendo el Gobierno catalán tapando la acusación contra CDC. No hay madre superiora que valga, hay que comparecer en el caso Palau acusando a Convergencia". Exigencia que lanza la CUP horas antes de la sesión de control a la que este miércoles se someterá Carles Puigdemont en la cámara.