Por primera vez en la historia, acreditar un nivel C2 de catalán –más alto del que se obtiene en la educación secundaria– podría ser un mérito para ser bombero de la Generalidad. Una novedad que llega cuando el Gobierno central ejerce el control de la administración autonómica en virtud de la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
Lo cuenta Crónica Global, que asegura que es una medida pactada con los sindicatos y que atribuye la información a fuentes internas de los propios Bomberos, que denuncian que se trata de una medida que restringirá aún más la escasa movilidad territorial actual en este tipo de cuerpos: "Hace de las plazas un objetivo cautivo para los catalanohablantes", aseguran las fuentes consultadas.
Desde la Generalidad se ha declinado hacer otro comentario que asegurar que las bases de estas pruebas aún no han sido publicadas en el Diario Oficial de la administración autonómica. No obstante, las fuentes a las que hace referencia Crónica Global aseguran que va a ser así porque está pactado con los sindicatos en reuniones en las que incluso ha participado el secretario general técnico de Interior, Juan Antonio Puigserver Martínez.