Mariano Rajoy no se plantea "ni golpes de efecto ni ocurrencias de última hora" en el pleno monográfico sobre pensiones, que se celebra este miércoles en el Congreso de los Diputados. "No habrá grandes anuncios pero sí un análisis muy exhaustivo sobre el problema", según fuentes de su entorno. Emplazará al Pacto de Toledo para alcanzar un gran acuerdo que garantice las prestaciones del futuro. En Génova confían en las dotes parlamentarias de su líder: "Nos estamos jugando mucho".
Para el jefe del Ejecutivo, se trata de un pleno decisivo, incluso "más importante" que el debate sobre el estado de la nación. "Lleva días con el tema y ha pedido papeles a los ministerios implicados", explicaron las fuentes consultadas. Este martes, vació su agenda pública para preparar a conciencia tanto su intervención inicial como las réplicas posteriores. Soraya Sáenz de Santamaría, José Luis Ayllón o Carmen Martínez Castro, claves en la estrategia presidencial.
Rajoy sopesa "gestos" con los pensionistas, pero sin poner en riesgo las grandes cifras del país. "Esto no es el PSOE", zanjaron en Moncloa. "¿Cuántas pensiones se pagan? ¿A cuánto asciende el gasto de las pensiones? ¿A qué ritmo crece ese gasto? ¿Cómo se paga?", se preguntará el presidente, para a renglón seguido hacer un diagnóstico real de la situación, "sin demagogia". Su objetivo es "hablar de solidaridad, de equidad y de sostenibilidad del sistema".
"En España hay más pensiones que nunca y son más altas que nunca. El sistema abona ya 9.573.282 pensiones. De acuerdo con los últimos datos, de febrero, la nómina de las pensiones contributivas supera ya los 8.925 millones de euros la pensión media de jubilación alcanza los 1.077,523 euros", se puede leer en los argumentarios internos remitidos a los cargos del PP.
En los últimos días, sobrepasado por las masivas protestas en la calle de los jubilados, el Gobierno abrió la puerta a subir las pensiones por encima del 0,25%, aunque en principio no contempla volver al IPC como referencia para revalorizar estas prestaciones. Además, Cristóbal Montoro sugirió una ayuda fiscal en el IRPF para los pensionistas que rondan los 80 años. "Las propuestas de futuro se harán en el marco del Pacto de Toledo y con los deberes bien hechos", aseguraron desde el ministerio de Hacienda. El presidente no entrará en una "subasta" de promesas "imposibles" de cumplir, resumió Rafael Hernando.
"Entiendo la reivindicación de los jubilados -de subir las pensiones con respecto al IPC-, lo que pasa es que todavía la recuperación no ha llegado donde todos queremos que llegue y no tenemos los recursos suficientes", arguyó recientemente Rajoy. "Yo quiero subirlas. Es un problema de poder hacerlo", llegó a reconocer en una entrevista en Telecinco.
Pese a las apelaciones a la "responsabilidad", en Moncloa no descartan un debate bronco, a cara de perro, en el que la oposición hagan bandera de las protestas de los pensionistas. Pero Rajoy "no aceptará lecciones" de la izquierda, según su equipo. "Gracias a que el Gobierno impidió el rescate, se evitaron también recortes en el sistema de pensiones como los que ha sufrido Grecia, de hasta un 40%", han repetido estos días Pablo Casado o Hernando.
El PP espera que el presidente no se amedrente y, en caso de ser necesario, entre en el cuerpo a cuerpo parlamentario. Un miembro de la dirección resumió la trascendencia del debate para el partido: "Tenemos que mantener la confianza de los pensionistas. No podemos permitirnos errores".