Mariano Rajoy llamó una vez más a la calma. A puerta cerrada, ante sus barones territoriales, reconoció que hay un "exceso de ruido" en la calle, con "movilizaciones" como la de los jubilados reclamando una mejora de sus pensiones. Pero aseguró que, a diferencia del resto de partidos, el PP tiene "más credibilidad" y una "gestión" como aval. Desdeñó, además, las encuestas recordando que se equivocaron estrepitosamente con respecto a los anteriores comicios. "Contigo España crece" es el lema de la convención nacional, que se celebrará en Sevilla después de Semana Santa.
Fue un Comité Ejecutivo de trámite, con ausencias destacadas y sin ningún tipo de debate interno. Nadie hizo uso el turno de réplica, como es habitual. El presidente desveló el calendario para la tramitación de los Presupuestos. Convocará un Consejo de Ministros extraordinario el Martes Santo para su aprobación. Al Congreso llegarán el 3 de abril y el debate a la totalidad se podría celebrar los días 25 y 26, según trasladó Rajoy a puerta cerrada. Las cuentas públicas pasarán por el Senado la primera quincena de julio. "Las negociaciones con Ciudadanos continúan", deslizaron las fuentes consultadas. También con el PNV, y al más alto nivel.
El Gobierno no necesita al PSOE para sacar adelante los PGE, pero sí para otros grandes acuerdos de Estado como la financiación autonómica o un plan hidrológico nacional. Si bien Rajoy reconoció que cada día ve más difícil pactar nada con Pedro Sánchez, y destacó que "se han levantado de la mesa" en la mesa de negociación del pacto educativo. En este sentido, pidió a los suyos que contrapongan esa actitud con la del Gobierno, que está "dialogando" y ha llegado a acuerdos con los agentes sociales o con los distintos cuerpos de seguridad del Estado.
Capítulo aparte dedicó a las pensiones. Ante sus barones, Rajoy se mostró comprensivo ante las protestas de este colectivo, según informó después en rueda de prensa Fernando Martínez-Maillo. "¿Cómo no se van a entender esas demandas legítimas de muchos ciudadanos?", se preguntó. Pero enfatizó que el Ejecutivo tiene que "cuadrar las cuentas". "La irresponsabilidad se la dejamos a la oposición", zanjó el coordinador general. Y censuró una y otra vez que el PSOE se lance a la calle en vez negociar en las Cortes. Sugirió que dicha esa estrategia acabará beneficiando a Podemos. Están "echados al monte".
"Debemos de tener un debate serio y no populista", afirmó Maillo, preguntado por la propuesta de Sánchez de que ministros y parlamentarios se suba el sueldo sólo un 0,25% si el Gobierno insiste en "castigar a los pensionistas". "La pregunta es qué va a votar el PSOE en el pacto de Toledo para mejorar las pensiones. Todo lo demás son ganas de enredar. Discurso fácil que no conduce a nada", resumió el número 3 del partido. "Altura de miras", exigió, también con la vista puesta en Ciudadanos.
El árbol "más robusto"
En clave interna, Maillo comparó al PP con el "árbol más robusto" que lo "aguanta todo". En el logo de la convención nacional aparece una encina, cuyas "raíces representan los valores firmes del PP, el tronco a sus militantes y las ramas a su amplia implantación territorial en toda España". Sin cámaras delante, Rajoy se cargó de datos de encuestas previas a las últimas elecciones para demostrar que se equivocan. "Los sondeos antes de las generales daban ganador a Podemos", destacó. "Tranquilidad", repitió. A ojos de Rajoy, los ciudadanos acabarán premiando su "responsabilidad".
Algunos líderes territoriales importantes se ausentaron, como Alberto Núñez Feijóo o Juan Vicente Herrera. Los que asistieron, callaron ante el diagnóstico Rajoy. "Vive en un estado de ataraxia", resumió un barón autonómico a la salida de la reunión. Esto es, muy tranquilo, sin temores ni deseos. "Se le ve seguro, como si tuviera controlada la situación", corroboró otro cargo que participó en el cónclave popular.