El pacto debe concertarse entre todas las corrientes de patriotas cívicos y jamás con los invasores republikanos y sus tontos útiles que ponen en peligro la integridad de España.
El todavía presidente del Gobierno se aferra al escaño, no dimite y se limita a desear suerte al futuro jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, "por el bien de España".
¿Qué es peor, la corrupción económica de una pandilla de indeseables o una pandilla de indeseables que pretende tapar la corrupción de Cataluña y la destrucción de España?