Tras un Consejo de Ministros Extraordinario con el único punto en el orden del día del "informe de gestión del presidente del Gobierno", Pedro Sanchez ha anunciado que convoca a los españoles a las urnas el próximo 28 de abril, tal y como adelantó Libertad Digital. En una declaración institucional, Sánchez ha confirmado la fecha que le obligará a disolver las Cortes el 5 de marzo. La comparecencia en principio iba a ser sin preguntas pero, al final, se han admitido varias, que han sido precedidas por un discurso de más de 20 minutos que ha sido el primer mitin de la campaña electoral, para el que el candidato del PSOE se ha servido de Moncloa.
Tres semanas por delante para hacer campaña electoral desde el Gobierno sin que ésta haya comenzado formalmente como ya ha ocurrido este viernes. Tras su comparecencia, Sánchez ha abandonado la sala de prensa del Consejo para asistir a la celebración de un segundo Consejo de Ministros, éste de carácter ordinario, en el que se aprobarán cuestiones como la reforma de la Lomce y la exhumación de Franco. Cuestiones que no verán la luz pero que el Gobierno llevará al Congreso de forma simbólica como arranque de campaña electoral. Lo hará dos semanas más con sus respectivos Consejos de Ministros que restan hasta la disolución del Parlamento el martes 5 de marzo.
"Nunca voy a renunciar al diálogo"
Ya en el turno de preguntas Sánchez ha explicado que siempre habrá quién crea que otra fecha sería mejor, pero dice que para él el 28 de abril "es buena fecha" y explica que "el debate es otro" porque "cuando la derecha se manifiesta en Colón dicen que quieren echar a Sanchez, el debate es qué España queremos. Es evidente que la derecha defiende una España en la que caben ellos y nosotros queremos una España en la que cabemos todos", asegura, criticando de nuevo a "una derecha vive en la añoranza de un tiempo pasado que no llegará".
"Hay derrotas parlamentarias que son victorias sociales, dice Sánchez", que asegura que "toda España ha visto" la agenda social de su gobierno y que el país "no merece quedar varado por los intereses particulares de unos y otros".
La oposición plantea debates que son absurdos por infantiles, dice Sánchez, que se pregunta "en tono sarcástico" si en la votación contra los presupuestos "también ha habido pactos ocultos". Sánchez presume de la historia constitucionalista del PSOE pero advierte de que "nunca voy a renunciar al diálogo".
"Nosotros siempre hemos tenido una hoja de ruta clara, un Gobierno lo que tiene hacer es lo que debe", ha explicado Sánchez que, después de no pocas declaraciones y filtraciones contradictorias al respecto, dice ahora que "sin presupuestos uno no puede gobernar" y por eso ahora convoca elecciones.
"Hemos sido coherentes, dijimos que veníamos a gobernar y hemos gobernado", dice Sánchez, que también carga contra los separatistas por no haber aprobado los presupuestos: "Nosotros hemos gobernado para todos, para todos los españoles vivan donde vivan".