Vox inicia el curso político con la duda de si finalmente se repetirán las elecciones, como ocurre con el resto de partidos. A pesar de que las encuestas no son favorables al partido de Santiago Abascal, la formación se muestra optimista y presume de superar los 50.000 afiliados para sostener que "esperan" mejorar el resultado del 28-A.
"Confiamos en que el aumento de la afiliación posterior a las generales nos permita crecer si se repiten las elecciones", aseguran fuentes del partido que evitan valorar la encuesta publicadas este lunes por El Mundo, que les da una caída de hasta 7 escaños, o la de El Español, que pronostica una caída de 2 diputados.
El partido defiende "estar preparado" para cualquier escenario, tanto si se repiten las elecciones como si PSOE y Podemos acaban llegando a un acuerdo para formar Gobierno. "La estructura y las direcciones nacional y territoriales están listas para una campaña electoral o una legislatura larga", aseguran estas fuentes.
El eurodiputado de Vox, Hermann Tertsch, auguraba también en Twitter que su partido "va a cosechar votos en todo el espectro político. En la izquierda que ve que PSOE y Podemos solo defienden a minorías antiespañolas e inmigrantes ilegales", decía, para añadir que también "irán a Vox los asqueado por Maroto en ABC", haciendo referencia a la entrevista en la que el senador del PP asegura que "hay mucha gente de centro derecha a la que asustaría ver a Vox en España Suma".
Precisamente sobre la propuesta del PP para concurrir con Cs bajo una misma marca, y que el partido abría recientemente también a Vox, desde el partido de Abascal insisten en decir que lo descartan por completo. La formación argumenta su rechazo asegurando que hay muchos asuntos en los que tienen propuestas distintas como los referidos a la inmigración ilegal, la Memoria Histórica o el Estado de las Autonomías.