Alberto Garzón ha acabado por ganar el pulso al sector socialista en lo referente a la carne. Tras casi quince días de polémica, la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, que llegó a calificar las declaraciones del Ministro de Consumo en The Guardian de "opiniones personales", aseguraba este lunes, en una entrevista en Al Rojo Vivo, que "en lo sustancial, ha quedado evidente que estamos de acuerdo".
Los ministros socialistas asumen así el discurso de Garzón, circunscribiendo sus palabras a una crítica contra las macrogranjas, y que ha dejado al PSOE en tierra de nadie: entre el PP, que capitalizaba el descontento mayoritario del sector, y Unidas Podemos que ha ganado el respaldo de pequeñas asociaciones de pequeños ganaderos.
En el PSOE aseguraban que el tema de la "guerra de la carne" no se ha tratado en la Ejecutiva del partido, presidida por Pedro Sánchez, donde sólo se ha hablado de "reforma laboral y de fondos europeos". Además de una reforma del reglamento interno y de nombrar a la exministra, María Luisa Carcedo, como nueva presidenta de la Fundación Pablo Iglesias.
Casado y las vacas
Aún así, el portavoz, Felipe Sicilia, se refería a la polémica de Garzón en la rueda de prensa posterior a la Ejecutiva. "Mientras algunos se dedican a hacerse fotos con vacas, nosotros nos dedicamos a hacer leyes para que esas vacas puedan seguir dando el beneficio que ese ganadero necesita para mantener esa explotación", decía el portavoz.
Los socialistas, conscientes de que la etiqueta "izquierda caviar", que les ha puesto el PP, les está lastrando, tratan de ridiculizar las constantes visitas de los políticos populares a explotaciones ganaderas. También la portavoz, Isabel Rodríguez, ha tenido palabras para Pablo Casado, que ha sustituido el tradicional graderío de afiliados en los mítines por decenas de vacas. "Comprobará que no es bueno ir a las granjas con zapatos nuevos de ante", decía la ministra.
Crear otro marco
En el PSOE tratan de huir de una polémica que ya lleva varias semanas en las portadas. Por eso, tratan de generar un nuevo marco: la de un PP boicoteador que trata de sabotear la llega de los fondos europeos y de la recuperación.
Pedro Sánchez, en La Moncloa tras su encuentro con Olaf Scholz, pedía responsabilidad y que "no hagamos de los fondos europeos una cuestión partidista sino una cuestión de país".
"Casado confunde hacer oposición con boicotear", decía Sicilia en Ferraz. Los socialistas salen así al paso de las querellas que varios presidentes autonómicos del PP han puesto por la "arbitrariedad" con la que se están gestionando las ayudas. Desde el PSOE defienden que se trata de una partida de 9 millones frente a los más de 130.000 que recibirá nuestro país.
"El PP está tratando de boicotear los fondos europeos. Es inédito también para Europa", reiteraba Sicilia. En el PSOE aseguran que "los controles" los han avalado "las Instituciones Europeas" y el "el Congreso de los Diputados", en referencia a la votación que, gracias a la abstención de VOX, permitió al Gobierno tener el control total de esos fondos.
Sánchez volverá a hacer campaña en Castilla y León
La ausencia más sonada de este fin de semana fue la de Pedro Sánchez en la campaña de Castilla y León. El secretario general del PSOE estuvo el sábado en Granada, junto a Juan Espadas, y el domingo lo tuvo libre pese a que todos los líderes de PP, Vox y Podemos estaban en plena precampaña castellana y leonesa.
La ausencia de Sánchez fue suplida por su mano derecha, Félix Bolaños. En el PSOE aseguran que el acto en Granada "estaba comprometido" antes de conocerse la convocatoria electoral en Castilla y León. "Vamos a estar todos los dirigentes del PSOE en las próximas semanas", añadía Sicilia quien prometía que toda la Ejecutiva se va "volcar" en la campaña. Este fin de semana, Sánchez sí estará en la campaña.