El Gobierno de España da un giro en sus relaciones diplomáticas con Rabat. De acoger al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, a apoyar el plan de Marruecos para convertir al Sáhara Occidental en una provincia autónoma. Así lo ha dejado claro el comunicado del Gobierno de España que recalcaba que se inicia "una nueva etapa basada en el respeto mutuo, el cumplimiento de los acuerdos, la ausencia de acciones unilaterales y la transparencia".
El breve escrito, que consta de tres puntos, habla también de cooperación "en la gestión de los flujos migratorios en el Mediterráneo y el Atlántico", después de un año más que complicado con asaltos violentos a las vallas de Ceuta y Melilla. El punto más tenso fue la noche del 17 de mayo de 2021 cuando 8000 irregulares, la mayoría niños, entraron a la capital ceutí por el paso del Tarajal. Otro foco de tensión fue Canarias hasta donde llegaron en 2020 hasta 23.000 ilegales en cayucos y pateras.
El Gobierno cede en la postura del Sáhara a cambio de recuperar la cooperación migratoria en la frontera con Marruecos. Tanto Pedro Sánchez como el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, viajarán antes de final de mes a Rabat para reunirse con Mohammed VI y dar por inaugurada esta nueva etapa, según desvela La Moncloa.
El comunicado llega sólo unos días después de conocerse que el juez del caso Ghali mantiene la imputación a la exministra de Exteriores, Arancha González Laya, y señalase la posible responsabilidad política de Pedro Sánchez al autoridad la llegada ilegal del líder del Frente Polisario para ser tratado de COVID en el hospital de Logroño.
"Argelia es un socio fiable"
Queda por ver cómo afecta este cambio a las relaciones de España con Argelia, el socio tradicional de los saharauis. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en una comparecencia urgente desde Barcelona, rechazaba confirmar si había informado a Argel del cambio: "Si le puedo decir que tengo una relación fluida con mi homólogo argelino y esa relación abordamos todos los asuntos"
En estos momentos, Argelia resulta clave ya que es el principal suministrador de gas a España. "Argelia es un socio fiable", decía Albares mientras elogiaba que "ese gasoducto puede poner en valor la relación entre los dos países". El ministro de Exteriores afirmaba que "siempre es un buen momento" para comenzar una "nueva etapa".
Indignación de Podemos
El comunicado del Gobierno de España, que confirma el de Marruecos anunciando que Sánchez respaldará su plan de autonomía para el Sáhara, ha soliviantado a Unidas Podemos que siempre se habían mostrado muy próximos a la causa saharaui.
Fuentes del entorno morado confirman que ningún ministro de la coalición había sido informado de la decisión. "Hay una unidad total en el seno del Gobierno", decía Albares en rueda de prensa. Tanto la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, como la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, no han esperado para hacer constar su malestar. En sendos mensajes en Twitter, arremeten contra la decisión de su Ejecutivo
Reafirmo mi compromiso con la defensa del pueblo saharaui y con las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Toda solución al conflicto debe pasar por el diálogo y el respeto a la voluntad democrática del pueblo saharaui. Seguiré trabajando en eso.
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) March 18, 2022
La líder de Podemos, Ione Belarra, también recordaba que ellos respaldan la "libre determinación del pueblo saharaui"
El conflicto del Sahara Occidental exige una "solución politica justa, duradera y aceptable para todas las partes" de acuerdo con las Resoluciones del Consejo de Seguridad que "prevea la libre determinación del pueblo saharaui". España no debe apartarse del derecho internacional.
— Ione Belarra (@ionebelarra) March 18, 2022
Esta crisis se suma a la de la entrega de las armas a Ucrania o la del aumento del Presupuesto en Defensa. En menos de quince días, Sánchez vuelve a tomar una medida sin el respaldo de sus socios y causando la indignación del partido minoritario del Gobierno.