Vox se ve cada vez más fuerte en los sondeos que, según creen, vienen avalados por el calor de la calle. Así lo demuestran las últimas manifestaciones convocadas por los sectores más descontentos con el Gobierno de Pedro Sánchez en plena crisis inflacionista por el alza de precios de la energía o los alimentos. Santiago Abascal ya se ha marcado como objetivo alcanzar, e incluso superar, los 100 escaños en las próximas elecciones generales.
El líder de Vox así lo ha trasladado a los más de 64.000 militantes que suma el partido, según datos aportados por la propia formación en la Asamblea General ordinaria que celebran cada año y que, esta vez, como novedad, incluye una reforma de los estatutos para eliminar las primarias provinciales.
"Estamos mucho más cerca de convertirnos en la primera fuerza política de España de lo que estábamos hace tres años de llegar donde hemos llegado", ha presumido Abascal para después asegurar que su "responsabilidad" y "obligación" es "alcanzar los 100 diputados". Una apuesta arriesgada teniendo en cuenta que Vox ha luchado siempre contra unas expectativas muy altas para evitar después decepciones en caso de no alcanzar ese objetivo, como ocurrió cuando irrumpieron en el Congreso con 24 escaños.
Aún así, el líder de Vox se ha impuesto ese deber ante los afiliados que han sido convocados a las 11 de esta mañana de forma telemática y que podrán votar las cuentas anuales fiscalizadas y los cambios estatutarios hasta las 18.00 de esta tarde. Ante ellos, Abascal ha advertido que "cuando a los españoles se les devuelva la voz", su partido "logrará convertirse en el primer partido de España y superar los 100 diputados". Un objetivo que, asegura, no se trata de un "deseo" sino de una "obligación con España".
Las referencias al PP
Durante su discurso ante los militantes se ha referido también a la crisis interna del PP justo cuando se celebra el Congreso del que saldrá elegido Alberto Núñez Feijóo como nuevo líder. "Vox es un partido unido, alejado de querellas internas, de batallas estériles, de esas divisiones intestinas que hemos visto en otros partidos que han estado a punto de destruirlos, si no lo han hecho", ha dicho, advirtiendo que no han venido aquí para ser "muleta o bisagra de nadie".
La salida de Pablo Casado del PP facilitó el acuerdo con Vox para gobernar en Castilla y León ya que la anterior dirección nacional de los populares había advertido que preferían perder gobiernos antes que pactar con los de Abascal, como así reiteró después el presidente saliente ante sus colegas europeos.
La Asamblea de Vox se celebra en un ambiente de euforia por los logros cosechados durante el último año 2021, como la irrupción en el Parlamento catalán con 11 diputados, el ligero crecimiento experimentado en Madrid hasta alcanzar los 13 escaños o los 13 representantes logrados en Castilla y León que les han permitido entrar por primera vez en un gobierno.