A tres semanas de las elecciones andaluzas, el PSOE empieza a notar una leve mejoría en sus trackings internos pero ya asumen que "gobernar está complicado", debido a la debilidad de los partidos a su izquierda. La idea que tienen los socialistas es movilizar a medio millón de votantes del PSOE que están en la abstención. "Si votan, ganamos", se ha instalado como leit motiv de la campaña en Ferraz y en la calle San Vicente.
La idea no es nueva. Llevan varias semanas repitiéndolo pero la cifra de votantes socialistas en la abstención se mantiene. Sólo están consiguiendo recuperar votos a su izquierda tras la esperpéntica irrupción de Por Andalucía, con Podemos llegando tarde al registro, y la división del voto con el partido de Teresa Rodríguez.
Sánchez se implica
Para tratar de movilizar al votante socialista, que votó en las generales pero piensa quedarse en casa durante las elecciones autonómicas, Ferraz ha diseñado una campaña en la que Pedro Sánchez tendrá unos tres actos, a los que se podrían sumar más. El presidente del Gobierno estará en el comienzo de campaña, que será en Almería, aunque antes también bajará a Despeñaperros.
Este fin de semana, Pedro Sánchez será el orador "estrella" del PSOE en Sevilla en un acto en el que le acompañará la principal ministra andaluza del Gobierno: María Jesús Montero. La presencia de la titular de Hacienda será una constante y se volcará para tratar de conseguir que la mayor parte de los andaluces de centro-izquierda se movilicen para votar a Juan Espadas
"Un fenómeno madrileño"
Lo que no notan en los cuarteles generales del PSOE, al menos de momento, es la irrupción de Macarena Olona como candidata de Vox. Los socialistas pensaban que su llegada iba a movilizar más al votante de izquierdas, pero los datos se mantienen. En el PSOE notan una ligera mejoría de Vox, que ya estaba alto antes de que se anunciase la candidata, pero auguran que, como mucho, tendrá 20 escaños.
"Es un fenómeno más madrileño que andaluz", observan algunos altos cargos socialistas sobre Olona quienes afirman que sus intervenciones en el Congreso son lejanas para la mayoría de los andaluces. "Últimamente estaba muy sobreactuada", afirman algunos que creen que "el personaje ha acabado por devorarla", mientras elogian su carácter en privado, "en cuanto que se bajaba de la tribuna".
Los socialistas creen que Vox tiene un gran hándicap en Andalucía: "La mayoría de los votantes está orgullo de ser español pero también es andalucista". La batalla por el "andalucismo moderado", auguran, estará entre Espadas y Moreno, con Olona fuera de la carrera debido al "carácter centralista" de Vox.