
Inés Cañizares es la nueva portavoz adjunta de Vox en el Congreso en sustitución de Macarena Olona, cuyo hueco en el grupo parlamentario ha sido tan difícil de cubrir que el partido ha optado por dividir sus funciones en dos, haciendo recaer el cargo de la secretaría general en otro diputado, José María Figaredo.
"Macarena es insustituible y no pretendo compararme con ella", asegura la diputada de Vox por Toledo, elogiando la que ha sido hasta ahora su compañera en el Congreso, a la que podría también sustituir preguntando a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, durante las sesiones de control al Gobierno.
Nacida en Las Pedroñeras, un pequeño pueblo de la provincia de Cuenca, hace 51 años, Cañizares se enorgullece de haber conocido de primera mano qué es el campo y cómo se trabaja en él. Siendo aún muy pequeña, con apenas once años, iba los veranos a la cosecha del ajo y la vendimia, donde aprendió el valor del esfuerzo y la disciplina, así como a ganarse la vida con el poco dinero que le pagaban y que le servía para comprarse algún capricho, como una bicicleta.
Su buena sintonía con Iván Espinosa

Hija de una peluquera y de un vendedor de maquinaria agrícola -convertido después en empleado de banca- defiende sus orígenes humildes ante quienes tildan a Vox de partido elitista o integrado por ricos con "apellidos compuestos", como dijo Pablo Iglesias a Iván Espinosa.
Con el portavoz parlamentario de Vox mantiene muy buena relación. A ambos les une la misma formación académica como Licenciada en Economía y Empresas, además de "tener caracteres parecidos", según asegura.
Su jefe se deshace en elogios hacia la diputada, a la que define como "una de las personas más queridas del grupo parlamentario". "Es una diputada que reúne una gran trayectoria profesional con un carácter personal muy apreciado", asegura Iván Espinosa a Libertad Digital.
De ella destaca que, como "buen auditora de cuentas, es trabajadora, inteligente, analítica y rigurosa" pero, por encima de todo, valora su "lado humano para hacer equipo y gestionar talento". "¡Es una crack!", resume el portavoz parlamentario de Vox al hablar de su compañera de filas.
Le "robó" el escaño a Girauta
Antes de acabar la carrera, con apenas 21 años, Cañizares empezó a trabajar en una empresa dedicada a la asesoría, donde permaneció durante nueve años, el tiempo suficiente para adquirir experiencia y poder montar su propio negocio como auditora y administradora concursal, labor a la que se dedicó hasta el año 2019, cuando entró en el Congreso como diputada por Vox.
Lo hizo después de que su partido lograra el segundo diputado por Toledo en las elecciones de noviembre, sumando uno más del que consiguieron por esta provincia en abril y que había recaído antes en Cs, concretamente en Juan Carlos Girauta, que no repitió cuando su formación se hundió hasta quedarse con apenas diez escaños.
Cañizares se afilió a Vox después de las elecciones andaluzas que dieron al partido sus primeros 12 diputados en la comunidad que celebra ahora comicios. Leyó las conocidas "100 medidas de Vox" y concluyó que "coincidían plenamente con todo lo que pensaba", especialmente en lo referido a la "reducción del gasto político, los impuestos, la burocracia o las trabas administrativas a la hora de emprender".
Asesora fiscal, defensora de bajar impuestos
Se ofreció a colaborar con Vox desde el primer momento, sin imaginar entonces que acabarían yendo en las listas al Congreso, donde ha destacado por sus enfrentamientos con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Función que considera todo un "privilegio" al brindarle la oportunidad de confrontar personalmente con quien tiene en su mano la capacidad de poder bajar impuestos.
Cañizares es vocal en la Comisión de Hacienda, portavoz en la de Presupuestos, adjunta en la de Asuntos Económicos, vocal en la del Pacto de Toledo, adjunta en la de Relaciones con el Tribunal de Cuentas y, además, en la de Reconstrucción Social y Económica.
Casada en segundas nupcias con un médico traumatólogo, tiene una hija de 20 años de su anterior matrimonio, con la que intenta pasar el mayor tiempo posible, a pesar de que su labor como diputada "le roba todavía más tiempo que la asesoría" en la que trabajaba antes de entrar en el Congreso.

¿Candidata en Castilla La Mancha?
Su nuevo nombramiento como portavoz adjunta le dará mucha más visibilidad mediática a tan sólo un año para las elecciones autonómicas en las que, según dijo Santiago Abascal en esRadio, Vox tirará de la "cantera" del Congreso para las candidaturas, por lo que no es descabellado pensar que pueda acabar presentándose en Castilla La Mancha, donde se ha dejado ver últimamente acompañada de Iván Espinosa.
Preguntada por esta posibilidad, Cañizares se limita a decir que "está a disposición del partido" y que "irá donde le diga Santiago", aunque admite que "estaría encantada" de asumir esa responsabilidad, si así lo decide su partido por ser "una manchega muy orgullosa de su tierra, que se siente muy arraigada a ella".