
No han pasado ni dos meses desde que Adriana Lastra presentó a la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, como candidata del PSOE a la alcaldía de Madrid. Ahora, sin madrina política debido a la dimisión de la por entonces vicesecretaria general, el PSOE se debate si mantenerla como cabeza de cartel frente a Almeida y Rita Maestre.
Este lunes, la Comisión Ejecutiva del PSOE ha aprobado las bases de los procesos de primarias para las elecciones municipales. Entre los municipios en los que se pretenden celebrar está Madrid. "Tenemos la sana costumbre el de elegir a nuestros candidatos en proceso de primarias", ha afirmado la portavoz Pilar Alegría quien evitaba respaldar a González pese a que se le había citado expresamente.
En el PSOE de Madrid siguen agitadas. Es una marea de fondo que lleva así más de 30 años, justo cuando perdieron el Ayuntamiento. Desde entonces, no han logrado tocar con la tecla pese a que han probado con todo tipo de candidatos. Ni con fichajes estrella (Pepu Hernández), ni con tertulianos mediáticos (Antonio Miguel Carmona), ni con candidatos desconocidos (Miguel Sebastián), ni con la cantera del partido (Trinidad Jiménez) o ministros (Fernando Morán). Todos se han estrellado. En estos años, el PSOE ha pasado de segunda fuerza en el Ayuntamiento a cuarta, siendo por superado por Ciudadanos, PP y Más Madrid, que le ha arrebatado el espacio de principal partido de la izquierda.
Las primarias como revulsivo
En el PSOE creen que la mejor manera de revitalizar el partido es con unas primarias. A ellas se podría presentar Mercedes González. La delegada del Gobierno dejaría de contar con el beneplácito de ser la "favorita de Ferraz", aunque tendría el respaldo de importantes pesos del partido.
Dentro del partido, varios grupos de militantes se mueven para que la joven concejal Enma López dé un paso al frente y se presente a las primarias. Su candidatura contaría con el respaldo de militantes de bases que valoran su papel de oposición a Martínez Almeida. La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Mar Espinar, también estaría sopesando dar la batalla, ya que se mostró crítica cuando el PSOE hizo el amago de designar a González.
A estos nombres, se ha sumado el de Fernando Grande-Marlaska. El ministro del Interior suena con insistencia en las quinielas socialistas si abandona el Gobierno en una próxima crisis gubernamental. Su designación pasaría por unas primarias aunque muchos recuerdan el fracaso de Trinidad Jiménez, cuando abandonó la cartera de Exteriores, para ser derrotada por Tomás Gómez.
Prueba irrefutable de que abandonar una cartera ministerial no te convierte en candidato si hay unas primarias de por medio. Una rebelión de las bases que acabó por tumbar los planes de Zapatero. Las primarias en el PSOE nunca salen como estaban previstas.