Las negociaciones entre PSOE y PP para renovar el CGPJ han dejado como principal damnificado a Alberto Núñez Feijóo al no haber conseguido sacar partido alguno del acercamiento a Pedro Sánchez, provocando un desgaste en su imagen de hombre infalible y escurridizo que en el partido se esfuerzan ahora por reflotar.
El Gobierno, por el contrario, parece haber encontrado una grieta por la que colarse para minar al líder del PP, después de meses completamente noqueado en el que ninguna estrategia parecía funcionar para frenar el llamado efecto Feijóo que recogían las encuestas.
Un sondeo realizado en plenas negociaciones del CGPJ ya recogía que la derecha perdía la mayoría absoluta por el frenazo del PP, situación que podría verse agravada en las próximas semanas después de que Feijóo haya registrado su primer fracaso importante desde que llegó a la presidencia del partido.
Para taponar esa herida, su hombre de confianza y su negociador en el proceso, Esteban González Pons, concede este martes una entrevista a El Mundo en la que rechaza que el líder del PP salga debilitado, llegando a presumir de que Feijóo "se dio cuenta antes que nadie de que el PSOE estaba jugando en dos mesas". En su opinión, "ha demostrado que tiene valor para echar el freno de mano".
"Sánchez no ha logrado engañarnos"
En la misma línea, el portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto, asegura en una entrevista en Europa Press que "Sánchez ha intentado engañar al PP y no lo ha conseguido", en un intento por alejar el fantasma de Pablo Casado.
El exlíder el PP salió también escaldado de las negociaciones con el PSOE cuando Sánchez impuso para la renovación del CGPJ al juez José Ricardo de Prada, encargado de la sentencia del caso Gürtel que motivó la moción de censura contra Mariano Rajoy.
Era una forma de torpedear el acuerdo con el PP colocándole en una situación imposible de asumir, lo mismo que ha ocurrido ahora con la rebaja del delito de sedición que el Gobierno admitió estar negociando con ERC en las horas previas a sellar un acuerdo sobre el CGPJ.
El PP busca desviar el foco
Se trataba así de someter a Feijóo hasta el punto, casi, de humillarlo al no dejarle ninguna vía de escape para defender ante los suyos un acuerdo que ya tenía una difícil venta, como demuestran las reticencias afloradas entre barones del PP como Isabel Díaz Ayuso, que pidieron frenar las negociaciones.
Para intentar desviar la cuestión hacia Pedro Sánchez o Félix Bolaños, al que el PP se esfuerza por señalar como principal perjudicado, Maroto anuncia ahora mociones en los Parlamentos autonómicos para preguntar "si se está a favor de rebajar el delito de sedición", con el objetivo de retratar a los barones socialistas como Javier Lambán o Emiliano García Page, a los que apela para intentar torcer el brazo al presidente y que no ceda al chantaje de ERC.