Que la relación entre la presidenta foral y socialista, María Chivite, y Bildu marcha viento en popa no es ningún secreto. Y que los proetarras consideran estratégico su avance en Navarra, tampoco. Y esos dos elementos, unidos a un tercero y mucho más importante -la dependencia nacional de Pedro Sánchez de los hombres de Arnaldo Otegi- ha hecho que la presidenta foral haya sellado ya su futuro más próximo con Bildu. El último acuerdo presupuestario de la Comunidad Navarra ha incluido, de hecho, todo un aparatoso riego de millones y el compromiso de Chivite de dar opción preferente de pacto de Gobierno a Bildu.
El PSOE y Bildu caminan más de la manos que nunca. Y lo hacen, como muestra de una estrategia global, en Navarra. El próximo mes de mayo de 2023, Bildu exigirá una prueba de fuego sobre la entrega de Sánchez y los socialistas a las exigencias de los de Otegi: Bildu quiere ya que el PSOE muestre públicamente su opción de Gobierno por ellos, por los proetarras. Que igual que lo ha hecho en el País Vasco con el PNV, que lo haga en Navarra y con Bildu, en caso de necesitar a los de Otegi tras las próximas elecciones regionales.
La decisión puede suponer dos claves de gran relevancia. La primera, que podría ser el primer Gobierno autonómico o nacional donde los socialistas aceptasen terminar de materializar ya el obvio blanqueamiento de Otegi con una alianza de Gobierno pura y dura.
La segunda, que se convertiría en un aviso a navegantes para el PNV: los nacionalistas de Urkullu ya tendrían un relevo visible y palpable, tal y como ya adelantó en su momento la líder de los socialistas en el País Vasco, Idoia Mendía: la misma que se fotografió con Arnaldo Otegi una Nochebuena preparando platos familiares para celebrar la bondad, el amor y el nacimiento de Jesús.
María Chivite ha confirmado ya a Bildu su predisposición a cualquier tipo de acuerdo para mantenerse en el Gobierno. Y lo ha hecho con pleno respaldo de Pedro Sánchez, quien ha sido consultado y mantenido al corriente permanentemente de las negociaciones presupuestarias con Bildu porque el pacto de los proetarras implicó desde un primer momento un apoyo duplicado a las exigencias de los de Otegi -en los Presupuestos nacionales y en los navarros-.
Hay que recordar que ya en aquel primer aviso de acercamiento radical a Bildu como posible socio de Gobierno en el País Vasco y tras la foto del brindis de Nochebuena entre Mendía y Otegi, fue el propio Sánchez el que salió al quite para confirmar la nueva tendencia: el propio presidente del Gobierno bendijo la imagen que apareció en portada del Diario Vasco bajo el titular "La mejor receta de la política".
El pacto ha sido sellado en plena negociación de los cuartos y últimos presupuestos navarros de María Chivite. Un trámite en el que la socialista ha vuelto a contar con el inestimable apoyo de Bildu y que supone un aumento de la partida destinada a la promoción del vascuence en Navarra, tanto en las escuelas, como en su divulgación a través de subvenciones destinadas a los medios de comunicación afines al separatismo vasco. Es decir: la misma estrategia seguida en Cataluña durante décadas.
El volumen de dinero logrado por Bildu en esta negociación se eleva a 15 millones. Y entre las partidas más cuantiosas e ideológicas destaca, por ejemplo, una de 740.000 euros centrada en el desarrollo de proyectos en medios de comunicación en la lengua vasca, un plan de ayuda al desarrollo del vascuence en los ayuntamientos o un programa de apoyo a la enseñanza entre los más mayores.
La socialista Chivite también se ha comprometido a apostar decididamente por el modelo educativo plenamente en vascuence en toda Navarra, acabando de forma definitiva con la diferenciación entre zonas con leve habla vascuence y cero penetración de esta lengua.
Pero, posiblemente, lo más importante de estas negociaciones no hayan sido los millones concedidos, sino las batallas políticas ganadas por los proetarras. Y es que Bildu, en caso de que el PSOE cumpla, puede pasar a tener el primer Gobierno a su alcance de forma presencial. Y, además, ante de marzo de 2023, el Ejecutivo de Chivite se ha comprometido a presentar un proyecto de Ley Foral para entregar un crédito extraordinario de 8 millones para elevar la financiación de los entes municipales, justo donde basa su fuerza y desarrollo Bildu. Simplemente como otro ejemplo más, los socialistas y los de Bildu han pactado igualmente el desarrollo del reglamento de la Policía Foral y de normativa adicional ecologista.