El Gobierno ha aprobado remitir al Constitucional la propuesta de Pedro Sánchez para relevar a Narváez y González Trevijano, los dos magistrados del TC de la cuota del Gobierno. Los candidatos de La Moncloa son el exministro de Justicia y exdiputado del PSOE, Juan Carlos Campo, y la exalto cargo de Félix Bolaños, Laura Díez.
El propio ministro de Presidencia, exjefe de Díez, ha defendido que son "dos perfiles idóneos", que ambos cuentan con un "conocimiento tan amplio de la Administración" y un "respeto absoluto a la Constitución y la ley".
Pese a que el paso de Campo por Justicia se caracterizó por medidas tan polémicas como el indulto a los golpistas, La Moncloa defiende su nombramiento para el TC donde tendrá que decidir sobre algunas de las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros cuando era titular de una cartera. "Juan Carlos Campo es un servidor público, acreditado y creo es la persona idónea. Es valorado tanto entre la derecha y la izquierda y un profundo conocer de la ley", ha afirmado Bolaños.
"No lo harán"
Ahora, el nombramiento de Campo y Díez queda en mano del Constitucional, que son los encargados de darle luz verde. En el Gobierno descartan un posible veto: "No lo harán", dicen fuentes del Ejecutivo. De momento, el Gobierno se ha guardado una carta: un decreto que destituya a Narváez y González Trevijano aunque no niegan que puedan ejecutarlo.
Saltándose al CGPJ
La mano derecha de Sánchez ha defendido que el Gobierno aprobase estos dos nombramientos, saltándose al CGPJ, que debe dar luz verde a otros dos magistrados de su cuota. Hasta ahora, las designaciones se producían de manera "simultánea" ya que la Constitución dice que las renovaciones deben hacerse por tercios.
"Nos gustaría que el Consejo hubiera nombrado. Lo podrían hacer esta misma tarde. Desde julio el CGPJ puede nombrar magistrados", ha afirmado el ministro de Presidencia en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Se esperaba esta semana
La decisión se esperaba para hoy o para el próximo lunes, en el consejo de ministros previo al Día de la Constitución. "Pronto" llegó a afirmar este pasado viernes Pedro Sánchez en una conversación informal con periodistas cuando se les preguntó por el día en el que se tomaría la decisión.
Ya entonces se daba por descontado que Sánchez lo haría sin esperar al CGPJ. Allí La Moncloa lucha desde hace hace tiempo por nombrar al progresista José Manuel Bandrés. Lo que ha sorprendido es que los dos jueces de la cuota del Gobierno sean dos magistrados que han estado trabajando para el Ejecutivo.
Uno, el exministro de Justicia Juan Carlos Campo, el que firmó los indultos a Junqueras y demás sediciosos. La otra, Laura Díez, exdirectora general de Asuntos Constitucionales y Coordinación Jurídica a las órdenes hasta hace unos meses de Félix Bolaños y muy vinculada al PSC. Hasta ahora, era la cuota de los socialistas catalanes en el Tribunal de Garantías Estatutarias de Cataluña.
Ninguno de los dos estaba en las quinielas y el descaro de Sánchez ha sorprendido incluso a los que ya están habituados a las puertas giratorias de un Gobierno que no duda en cambiar ministerios o escaños por puestos en la Fiscalía y ahora también en el Constitucional.