Entre las múltiples leyes ideológicas que nos deja el 2022, destaca la ley Trans. Después de meses de idas y venidas -y tensiones incluso dentro del propio Gobierno de coalición-, el Congreso aprobaba el polémico texto impulsado por Irene Montero el pasado 22 de diciembre. Ahora, deberá pasar por el Senado y, en caso de introducir algún cambio, regresar a la Cámara Baja para ser ratificado de nuevo.
La tramitación parlamentaria augura así un 2023 en el que la ley que consagra el derecho a la autodeterminación de género desde los 12 años volverá a estar en boca de todos. Frente a la más que previsible manipulación de gran parte de la izquierda -no hay que olvidar que el movimiento feminista está radicalmente en contra- Libertad Digital repasa los mejores artículos publicados sobre la ley Trans a lo largo del último año, la mejor munición frente a aquellos que pretenden hacer ver que todo aquel que la cuestiona es un tránsfobo sin argumentos.
Para entender de forma resumida cuáles son los puntos más controvertidos de la nueva ley, LD publicó el pasado mes de junio una primera guía rápida que aclaraba cómo se podrá solicitar el cambio en el Registro, así como los peligros tanto de la propia autodeterminación, como de la llamada "despatologización", que acaba con el acompañamiento médico de aquellos que se declaran trans.
La libre autodeterminación de género sin informes médicos pronto empezó a inquietar a mujeres, deportistas y padres: ¿Qué baños utilizarán las personas trans? ¿Habrá hombres biológicos en cárceles de mujeres? ¿En qué equipos jugarán en las competiciones deportivas? Todas estas dudas las abordamos en el siguiente artículo.
Entre los sectores que más han dado la batalla contra esta ley, destacan claramente las feministas, quienes esgrimieron un aluvión de argumentos para oponerse a una norma que, al igual que un sinfín de expertos, no dudaron en calificar como una auténtica "aberración". A nivel escolar, fueron las profesoras de Dofemco (Docentes Feministas por la Coeducación) las que destaparon los inquietantes protocolos trans que ya hay en colegios de toda España, advirtiendo de que "lo peor está por venir".
En cuanto al impacto de las leyes trans en el deporte, si hay alguien que ha sabido resumir y transmitir las consecuencias como nadie ésa es Irene Aguiar, experta en deporte femenino. La entrevista que Núria Richart le hizo el pasado mes de abril no tiene desperdicio.
Otro de los aspectos de los que apenas se ha hecho eco la prensa es del impacto que la ley Trans tendrá en el mercado laboral. La propia Irene Montero no ha querido hablar de ello, consciente de la polémica que podría suscitar. Sin embargo, tal y como publicó LD, la nueva norma deja la puerta abierta a la reserva de plazas específicas para personas trans tanto en el sector púbico como en el privado.
Muchos de los argumentos que hemos repasado hasta ahora fueron recogidos en un durísimo informe que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) remitió al Gobierno ya en el mes de abril. 136 páginas a las que Libertad Digital tuvo acceso en exclusiva y en las que no solo constataba que la ley Trans discrimina a la mujer, inventa palabras y amenaza el deporte, sino que, además, reclamaba elevar la edad para solicitar el cambio en el Registro a los 18 años. Como era de esperar, el Gobierno hizo caso omiso a toda crítica y recomendación.
No fue el único organismo que manifestó su rechazo a la ley impulsada por Irene Montero. En julio, el Consejo de Estado presidido por la socialista María Teresa Fernández de la Vega hizo público el informe que había remitido al Gobierno y que éste, al igual que hizo con el del CGPJ, había ignorado. En él, se oponía frontalmente tanto a la libre autodeterminación de los menores como al hecho de que cualquier persona pueda cambiar su género sin respaldo de ningún informe médico.
Y como no hay dos sin tres, a los informes del CGPJ y del Consejo de Estado se sumó el de la Fiscalía. Lo más grave de todo este asunto es que, después de encargarlo él mismo, el fiscal general del Estado decidió ocultarlo cuando comprobó que las conclusiones perjudicaban al Gobierno. Una vez más, Libertad Digital accedió en exclusiva a este documento, que cuestionaba los pilares de la ley Trans.
El rechazo era tan unánime, que los partidos de Gobierno se negaron a escuchar a los expertos durante su tramitación parlamentaria, algo que, sin embargo, es habitual ante leyes de calado. Ni un solo médico o psicólogo subió a la tribuna de oradores para dar su opinión. Aun así, los pediatras se encargaron de hacer públicas sus advertencias, y prestigiosos psiquiatras como Celso Arango no dudaron en explicar a quienes quisieron escucharle -Libertad Digital lo hizo- otro de los mayores peligros de la nueva ley: cómo lo trans ya se está convirtiendo en una moda a la que aferrarse, creyendo que es la solución mágica a graves problemas que, de ahora en adelante, podrían quedar sin respuesta.
Lo que Celso Arango explicaba era exactamente lo que las madres de Amanda (Agrupación de Madres de Adolescentes y Niñas con Disforia Acelerada) llevaban tiempo denunciando: sus hijas, que jamás habían dado ningún síntoma de rechazar su sexo biológico, habían llegado a casa en plena adolescencia y les habían comunicado que en realidad eran chicos trans.
Tras comprobar en primera persona cómo sus problemas eran realmente otros, no dudaron en movilizarse para dar la batalla contra Irene Montero. A pesar de que el Gobierno y gran parte de los medios de comunicación intentes silenciarlas, todas ellas -y sus hijas, muchas de las cuales ya han reconocido su arrepentimiento-, son el mejor ejemplo para entender el daño que puede causar una ley que se ha hecho de espaldas a los expertos.
A lo largo de este año, Libertad Digital también ha publicado la historia de varios trans arrepentidos: hombres y mujeres que se adentraron en un mundo de hormonas y cirugías que, sin embargo, no ha solucionado su disforia y que hoy alzan la voz contra Irene Montero y su peligrosa ley Trans.
Pero, sin lugar a duda, si hay algo que no podemos obviar es lo que ha pasado en otros lugares del mundo: países que fueron pioneros a la hora de aprobar leyes trans ya han comenzado a rectificar después de comprobar las terribles consecuencias que han sufrido miles de personas. Entre ellos, Suecia, Finlandia o Reino Unido, donde se ha cerrado la clínica de referencia mundial en el tratamiento hormonal de menores.
Con tal arsenal de argumentos, los principales detractores de la ley Trans mantienen la esperanza de poder tumbarla antes de su aprobación definitiva. Lo que nos depare el 2023 es hoy una incógnita, pero si algo tienen claro todos ellos es que darán la batalla hasta el último minuto.