Acostumbrados a entrar en la batalla de cifras, PSOE y Podemos guardan hoy silencio ante el incuestionable éxito de la manifestación contra el Gobierno celebrada este sábado en Cibeles. Las imágenes que este domingo copan las portadas de los principales periódicos nacionales -y que ya ayer circularon en digitales y televisiones- no dejan lugar a dudas, y eso es precisamente lo que más parece escocer a una izquierda que se debate entre ignorar la concentración y arremeter contra los manifestantes.
Frente a su habitual verborrea en redes sociales, los representantes del Gobierno de coalición optan hoy por capear el asunto. Tan solo aquellos que han participado en actos de partido en los que era imposible esquivar el interés de la prensa, se han avenido a pronunciarse. "Sólo saben hacer ruido para que no se escuche la música del progreso", ha dicho María Jesús Montero. "No hubo una manifestación en pro de los derechos, sino en pro de la derecha", ha añadido.
La ministra de Hacienda, que este domingo apadrinaba la presentación del candidato a la alcaldía de Córdoba, manipulaba la realidad para tratar de hacer ver que lo que ondeaba en Cibeles no eran miles de banderas de España, sino "banderas preconstitucionales, banderas del aguilucho, porque lo que se pretendía es volver a la España negra". Se trata de algo que ya apuntó este sábado el diario El País que, sin embargo, no ha sido capaz de publicar ni una sola imagen que sustente tal afirmación.
Al igual que ya hiciera Pedro Sánchez, Montero no ha dudado, además, en comparar la manifestación celebrada en Madrid con la organizada en Cataluña por los independentistas, insistiendo en que unos y otros buscan lo mismo, "la confrontación", sin darse cuenta de que son una minoría. "Entre los manifestantes nostálgicos que el jueves defendían en Barcelona una España rota y los de Madrid de hoy que defienden una España uniforme y excluyente, están la mayoría de los españoles, que quieren una España unida, que respete la diversidad y que avance en derechos y en prosperidad", decía este sábado el presidente del Gobierno, despreciando a los miles de asistentes que reclamaban su dimisión.
El silencio de Podemos
Mientras tanto, la consigna en Podemos parece ser la de ignorar una manifestación que si bien situaba a Pedro Sánchez como el blanco de sus ataques, les salpicaba de lleno. Únicamente el portavoz del grupo Parlamentario de Podemos, Pablo Echenique, colgaba a última hora del sábado un mensaje en su cuenta de Twitter y no para discutir la gran asistencia al acto celebrado en Madrid, sino para presentar a los asistentes como extremistas que buscan hacer seguidismo de lo ocurrido recientemente en Brasil.
"Un abrazo muy fuerte a todos los fotógrafos y cámaras que han acudido esta mañana a la manifestación bolsonarista en Madrid y que han tenido que trabajar duro buscando ángulos extraños y descartando cientos de tomas para que no apareciera la bandera con el pollo o cruces gamadas", reza el mensaje, que ya ha recibido numerosas respuestas ridiculizando la "rabieta" y denunciando que Podemos siempre busque "meter a Franco en cada tuit".
Un abrazo muy fuerte a todos los fotógrafos y cámaras que han acudido esta mañana a la manifestación bolsonarista en Madrid y que han tenido que trabajar duro buscando ángulos extraños y descartando cientos de tomas para que no apareciera la bandera con el pollo o cruces gamadas.
— Pablo Echenique (@PabloEchenique) January 21, 2023
El incuestionable éxito de la manifestación tal vez explique también por qué ni un solo miembro más de la cúpula del partido o sus ministras han mencionado siquiera el acto convocado por Foro España Cívica y Fundación Foro Libertad y Alternativa. Ni Irene Montero, ni su polémica mano derecha Ángela Rodríguez Pam, se han referido a la concentración de Cibeles. Tampoco la líder de Podemos, Ione Belarra, que este sábado prefería arremeter contra Mercadona y Carrefour, culpándoles de escalada de precios.