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Vox pide suprimir la fundación Pluralismo y Convivencia tras el atentado de Algeciras

El partido denuncia que se dedica a difundir "confesiones hostiles a la convivencia democrática y la dignidad de las mujeres".

El partido denuncia que se dedica a difundir "confesiones hostiles a la convivencia democrática y la dignidad de las mujeres".
Santiago Abascal interviene desde la tribuna del Congreso. | Vox

Vox ha registrado una proposición no de ley en el Congreso para eliminar la fundación Pluralismo y Convivencia, creada durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en octubre de 2004, poco después de llegar al poder, y adscrita al Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática. Su titular, Félix Bolaños, preside el patronato de esta fundación.

El partido de Abascal reclama destinar los dos millones de euros que esta entidad recibirá en 2023, según los Presupuestos Generales del Estado recientemente aprobados, a "resolver la emergencia social y económica que afrontan las familias españolas" en lugar de actividades que se limitan a "difundir y promover confesiones que son, en algunos casos, hostiles a la convivencia democrática y que atentan contra la dignidad de las mujeres".

La petición se produce apenas dos días después del atentado yihadista en varias iglesias de Algeciras, perpetrado por un marroquí que residía ilegalmente en España, al grito de "Alá es grande". El partido ha pedido también la comparecencia en el Congreso del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para que dé explicaciones sobre lo ocurrido, además de solicitar un pleno urgente en el Parlamento Europeo al respecto.

En medio de la alarma generada por estos hechos, Vox pone el foco sobre la fundación Pluralismo y Convivencia, a la que acusa de actuar en base a "dogmas" y "pretensiones de transformación social globalista que representan la Agenda 2030". Como ejemplo citan un informe elaborado por la entidad en diciembre de 2022 que lleva por título "Ciudadanía, juventud e islam. El asociacionismo de los jóvenes en España".

El contenido del informe

En el citado documento se recoge que "en España hay un proceso que todavía sigue en marcha y que puede denominarse de institucionalización del islam", elogiando a las "asociaciones que bajo la forma legal de entidades religiosas islámicas han ido generando espacios para el culto y para la atención a las demandas de la población musulmana".

"Las mezquitas, las comunidades, son espacios donde los niños y niñas socializan con otros niños y niñas como ellos, con sus familias y donde, en muchas ocasiones, además de los rudimentos del islam y de la lengua árabe, aprenden sobre los países de origen de sus familias", recoge el informe que habla también de la etapa juvenil para señalar que "al llegar a una cierta edad la formación que allí reciben a través de la enseñanza del árabe y del islam, a través del aprendizaje del texto sagrado y saberes básicos, no les resulta suficiente para enfrentar las múltiples preguntas que se hacen —y que les hacen— sobre qué significa ser musulmanes".

Más presencia del islam en la educación

El informe incide especialmente en el sistema educativo español para señalar que "la falta de preparación del profesorado para gestionar la diversidad religiosa y cultural en el aula es otro de los elementos determinantes que afloran en las conversaciones entre los jóvenes", o que no sólo tienen "derecho a recibir enseñanza religiosa en la escuela" sino a "la adecuación del menú halal en los comedores", criticando que "no es tenida siempre en cuenta".

También hablan de que "la juventud musulmana prosigue con fuerza en la exigencia de poder enterrar a sus familiares en cementerios islámicos" y que "los jóvenes quieren encontrarse con otros jóvenes para rezar, pero no siempre les resulta sencillo. Demandan espacios y salas de oración en las universidades e instituciones públicas, al igual que reclaman que se garantice el acceso a mezquitas y oratorios a toda la comunidad".

En cuanto a la "islamofobia" señalan que "para muchos jóvenes musulmanes y musulmanas, asumir el discurso de la islamofobia y vehicularlo en las luchas antirracistas, supone alimentar la extranjerización de un islam que muchos reivindican como español".

Vox defiende que "no se puede entender la civilización occidental sin los tres pilares sobre los que se constituyó: tradición cristiana, filosofía griega y Derecho romano" y critica al Gobierno por facilitar que "otras confesiones religiosas adquieran una mayor relevancia en nuestra sociedad perpetrando el efecto llamada a la inmigración ilegal".

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