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PP y Vox salvan a Pedro Sánchez de Irene Montero y sus socios

El PSOE saca adelante la Proposición de Ley con 231 votos, gracias al PP, mientras Vox se abstiene junto a Más País.

El PSOE saca adelante la Proposición de Ley con 231 votos, gracias al PP, mientras Vox se abstiene junto a Más País.
Las ministras de Igualdad, Irene Montero,y Derechos Sociales, Ione Belarra. | EFE

El autodefinido como el Gobierno "más feminista" de la historia pasará a la posteridad como el que celebró uno de los plenos más dañinos para las mujeres. "Lo han roto todo", sentenció la diputada de ERC, Pilar Valluguera, ante la escalada verbal a la que se estaba asistiendo en el hemiciclo y en los pasillos.

Su discurso era escuchado con gesto serio por parte de Irene Montero, sentada en la bancada azul. La ministra de Igualdad se apoyó en la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que venía a respaldar a su compañera de gabinete en una bancada azul desierta.

"Es una mala noticia, y más en vísperas del 8-M, que el PSOE se dé la mano de la derecha para volver al Código Penal de la violencia e intimidación", afirmó Montero en el pasillo, para calentar el pleno.

Surtió efecto. La secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, le respondió desde la Tribuna. "El derecho penal debe ser justo pero raramente es transformados. Aquí no valen eslóganes", afirmó la diputada socialista quien pidió a los diputados de Unidas Podemos que mostrasen sus propuestas para solucionar la ley. "Estamos cansadas de sus peroratas", sentenció Fernández que recomendó a sus socios de Gobierno dejar "la hipérbole" y que, en su lugar, hablasen "de soluciones" .

Unas afirmaciones que no eran escuchadas por la diputada de Unidas Podemos, Lucía Muñoz, la encargada de fijar la posición de su grupo. Durante su intervención, acusó al PSOE de alinearse con PP y Vox para "volver al Código Penal de Penal de La Manada y volver a preguntarnos si cerramos bien las piernas".

La diputada de Podemos señaló a los socialistas como los responsables de "traicionar" a las mujeres aliándose "con un puñado de fascistas" mientras que Andrea Fernández sólo hacía una mención velada al respaldo de PP y Vox. "En cuestiones de tanta relevancia no importa el con quién sino el para quién", añadió la joven congresista leonesa quien, tras 721 rebajas de condena y 74 excarcelaciones, lamentó "profundamente los errores" que contiene la norma. "No está funcionando adecuadamente y hay que modificarla, hay que ser consecuentes y responsables", añadió Fernández para defender la Proposición

Ruptura de la coalición Frankestein

De los socios habituales del Gobierno, sólo el PNV respaldó al PSOE. "Ahora es tiempo de reparar la alarma generada y expresar la solidaridad con las víctimas", expresó el diputado del PNV, Mikel Legarza, quien recordaba que es una reforma "a futuro" y que el beneficio de irrestroactividad permitirá que continúe el goteo de casos.

La diputada de ERC, Pilar Valluguera, al igual que los de Bildu se alineó con las tesis de Montero para atacar a los jueces como responsables de las rebajas penitenciarias a agresores sexuales. La separatista, muy crítica con el PSOE, pidió que no le diesen a elegir si quería más a "papá o a mamá", aunque al final optó por Mamá Irene.

La derecha, al rescate

La toma en consideración de la reforma salía adelante con el respaldo de PP y la abstención de Vox. Cuca Gamarra explicaba que esta reforma era una "enmienda" de Pedro Sánchez a su propio gobierno y pedía responsabilidades al Ejecutivo: "En política, se pueden asumir responsabilidades. Se puede dimitir", dijo mirando a Irene Montero.

La portavoz del Partido Popular defendió el sí de su grupo a la iniciativa para modificar "cuanto antes" la medida, y criticó que "el PSOE no ha presentado esta reforma por la alarma social ni promovido por el remordimiento ni por las víctimas, la causa de esta iniciativa es la alarma electoral".

"Esta es la ley de Pedro Sánchez y yo me pregunto, ¿dónde está hoy Sánchez? ¿Dónde está hoy la parte socialista del Gobierno?", se preguntó durante su intervención la diputada del PP con una bancada del Gobierno en la que solo estaban Irene Montero y Ione Belarra. Ningún miembro de la parte socialista del Ejecutivo asistió al debate.

Vox: "Son el partido que más gasta en prostitutas"

La diputada de Vox, Carla Toscano, no desaprovechaba la ocasión de recordar al PSOE que la reforma del sólo sí es sí se debate en pleno escándalo del Tito Berni y las fiestas con prostitutas. "Son el partido que más gasta en prostitutas", decía sin tapujos la diputada dirigiéndose a los socialistas, a los que reprochaba su incoherencia.

"Han perdido toda autoridad moral para hablar de las mujeres", añadía. Al PP le reprochaba "poner una vela a Dios y otra al diablo" por limitarse a criticar la reducción de penas y no el contenido de la norma que Vox pide derogar, defendiendo que hoy se votaba su toma en consideración, es decir, si se debate en el Parlamento.

Adanero, el más aplaudido

La intervención más aplaudida fue la del diputado navarro Carlos García Adanero. El portavoz del grupo mixto recordó al PSOE que la ley la aprobó "su Gobierno" y que "se les avisó de lo que ha pasado con informes y en sede parlamentaria". "Ustedes no hicieron ni caso", recriminó ante una ovación cerrada de los diputados de PP y Vox.

La diputada canaria, Ana María Oramas, pidió "perdón a las víctimas y sus familiares" por "el inmenso error" de aprobar una ley "que tanto dolor ha causado". La portavoz de CC también lamentó las frases de Ángeles Rodríguez Pam, restando importancia a las importancia a la suelta de violadores.

Por parte de Cs fue la diputada Sara Giménez la que tomó la palabra. En su escaño se encontraba Edmundo Bal, que fue el que defendió el el voto afirmativo de Cs a la ley del sólo sí es sí de Irene Montero en su aprobación el pasado mes de agosto. "No se vuelve al Código Penal de La Manada. La reforma es adecuada", defendió ante una molesta Irene Montero que negaba con la cabeza desde su asiento.

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