EH Bildu, la coalición que integra en su seno a los herederos de Batasuna-ETA, ha conseguido un gran éxito electoral en las elecciones municipales y forales del 28M. Ha sido la gran ganadora en el País Vasco y aumentó su fuerza electoral en Navarra. En términos cuantitativos, ha conseguido 29 mayorías absolutas y ha sido la primera fuerza política en las Juntas Generales de Guipúzcoa y en 112 localidades vascas y navarras.
Todo ello, pese a la polémica que generó durante la campaña electoral el hecho de que sus listas tuviesen 44 candidatos fueron condenados por formar parte o colaborar con ETA, es decir, que tuvieron una relación directa con la actividad asesina de la organización terrorista. Siete de esos candidatos tienen delitos de sangre en su historial criminal, aunque debido a la polémica generada prometieron no tomar posesión de sus actas si salían elegidos.
Después de los resultados electorales de esta semana, hasta 15 de esos candidatos condenados por su actividad terrorista han sido elegidos en las instituciones por las que se presentaron. Dos de ellos, incluso, forman parte de los siete que cuentan con delitos de sangre por haber participado de diferentes formas en asesinatos de ETA. Se trata de Begoña Uzkudun (Régil) y Juan Carlos Arriaga Martínez (Berrioplano).