
Vox se esfuerza por intentar superar la crisis que vive desde hace algo más de un año, y que se ha visto agravada tras el resultado del 23-J. La salida de rostros conocidos, como el de Iván Espinosa, ha agitado las críticas internas incluso de cargos como el que fuera secretario general, Javier Ortega Smith, con el que la dirección evita, de momento, el choque en público para no avivar la polémica.
Después de que el concejal de Madrid dijera en una entrevista en Europa Press que "Vox no puede convertirse en una agencia de colocación", el actual secretario general del partido, Ignacio Garriga, ha asegurado que "por supuesto compartimos la reflexión de nuestro vicepresidente Javier Ortega porque este partido jamás se va a convertir en una agencia de colocación como ocurre en otros partidos".
"Buscamos personas comprometidas y que estén dispuestas a servir a nuestra querida nación", ha defendido Garriga, mostrándose "orgulloso" de todos los cargos que forman parte de Vox, evitando así responder públicamente a las críticas, cada día menos veladas, de Ortega Smith.
Al ser preguntado por la petición de Smith para "regresar a los orígenes del partido", Garriga ha advertido de que "todos los que apelan a eso son incapaces de decir qué se decía antes y qué es lo que decimos ahora porque es radicalmente falso".
"Decimos lo mismo en 2014 que en 2023 y que seguiremos defendiendo en 2030 o 2050", insistía para rematar asegurando que "la razón de ser de este movimiento patriótico, que va más allá de unas siglas, es el compromiso con nuestra patria y con unos principios y unos valores".
El secretario general admitía que las palabras de Ortega Smith pueden dar lugar a interpretaciones pero decía estar "convencido" de que, tanto él como el resto de cargos de Vox, "son conscientes de que defendemos lo mismo".
Como viene siendo habitual en el partido, Garriga señalaba de nuevo a la prensa de "izquierdas y autodenominada de centroderecha" por sus "ataques" contra Vox, que tiene por objetivo "buscar alguna fuga", decía, para acabar advirtiéndoles de que "no la van a encontrar" porque "lo mismo que decíamos encima de una caja en 2014 lo estamos diciendo ahora desde el Congreso y en todos los Parlamentos".