
El Congreso ha dado luz verde a la prórroga hasta el 7 de marzo de la Comisión de Justicia para que apruebe un nuevo "dictamen" de la Comisión de la Justicia. En el Ejecutivo ya asumen que, hasta ese momento, no va a haber acuerdo con Junts. "Siempre se apura hasta el último día, hasta que toque la campana", aseguran fuentes de la cúpula de la partido que prefieren guardar discreción sobre lo que se está negociando.
Tras unas semanas de bloqueo, en los que empezó a cundir la sensación de que la ley de amnistía no saldría, las negociaciones se volvieron a activar la semana pasada. El optimismo era tal que en el Gobierno empezó a extenderse la idea de que se podría cerrar un acuerdo tras las elecciones gallegas y que no sería necesaria una prórroga de la Comisión. Hasta Barcelona se desplazó el pasado jueves el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, pero el pacto tampoco se cerró.
Moncloa optó , como paso "preventivo", activar una prórroga de la Comisión para tener más tiempo. Algunos creían que, a finales de esta semana, se podría lograr un acuerdo pero ahora en la cúpula del Gobierno se extiende la idea de que Junts "apurará para meter su redactado en el último minuto" y que ,durante estos días, seguirán en posiciones de máximos: que se incluya en la amnistía a todos los delitos de terrorismo y también el de alta traición. Hasta el 7, en Moncloa saben que jugarán esa carta.
En el Gobierno no desvelan sus cartas pero, en principio, siguen en esa máxima de no tocar lo ya existente. Tampoco si, como dijo el consejero catalán, se ha ofrecido indultos a todos aquellos que queden descolgados de la ley de amnistía. Todo se mueve en el secretismo más absoluto y en esa máxima del ministro Félix Bolaños: discreción en las negociaciones.
¿Y los Presupuestos?
En la sesión parlamentaria de este martes, fue llamativo ver cómo los independentistas, Bildu y Junts, ya se situaban en la siguiente pantalla, la de Presupuestos, y evitaban preguntar al Gobierno por la amnistía. Fuentes del partido de Puigdemont admiten que están "viendo" las propuestas que les llega desde Moncloa para aprobar las cuentas.
En el Gobierno reconocen que, aunque Junts pregunte por Presupuestos, eso no significa que vaya a haber fumata blanca en breve: ni en amnistía, ni en las cuentas del Estado. Tampoco creen que Junts esté avanzando en la línea de priorizar los Presupuestos frente a la medida de gracia a Puigdemont, pese a que los principales negociadores del Ejecutivo llevan varias semanas tanteando a sus socios, hablando con los interlocutores más económicos.
"Sí, sí, hay avances", reconocía en los pasillos del Congreso la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pero sin concretar más. A diferencia de hace unas semanas, cuando fuentes del Ejecutivo admitieron la posibilidad de prorrogar Presupuestos si no había amnistía, ahora en el Gobierno afirman que "no condicionan una cosa a la otra" pero asumen que "la amnistía es muy importante para ellos". Por tanto, es muy difícil que den pasos adelante, si no tienen su ley garantizada.


