El Partido Popular insiste en agitar la idea de que el PSC acabará apoyando a Carles Puigdemont para que sea presidente de Cataluña. Después de que el fugado exija apoyo a Pedro Sánchez recordándole que él le hizo presidente, el portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, le ha exigido que responda antes de las europeas del 9 de junio si aceptará el chantaje.
"Cada vez que el independentismo exige, Sánchez cede y claudica", ha advertido Tellado durante una visita a Asturias, donde ha augurado que "Puigdemont puede volver a España en el Falcon de Sánchez, con una alfombra roja, pese a tener orden de busca y captura". El propio Alberto Núñez Feijóo dio por seguro el pasado martes que el acuerdo acabará consumándose, avanzando incluso las tres fases de la estrategia socialista para apoyar a Junts.
Tellado ha reclamado al presidente del Gobierno que responda con claridad al "órdago" de Puigdemont para responder "si dejará caer a Illa". "No espere a responder la pregunta después de las elecciones europeas, los españoles tienen derecho a saber si Sánchez va a ceder, una vez más, ante el independentismo", ha exigido.
La retirada de Oriol Junqueras como líder de ERC, que amenaza con volver en noviembre, una vez se disipe la incógnita de si habrá o no repetición electoral, arroja todavía más dudas sobre los posibles pactos de gobierno. La formación insiste en que no apoyará a Illa, a pesar del riesgo que supone ir a las urnas con el partido en caída libre y dividido por la gestión de los últimos años.
En paralelo a la reflexión de Junqueras, los de Junts insisten en reclamar el apoyo del PSC en pago a la investidura de Sánchez, a pesar de haber conseguido ya la amnistía. Desde el PSOE aseguran que no apoyarán a Puigdemont pero en el PP se muestran convencidos de que la cita con las urnas el próximo 9 de junio retrasaría esa posibilidad que dan casi por segura.
Al margen del escenario catalán, Tellado ha anunciado que han pedido a la presidenta de las Cortes, Francina Armengol, que triplique los tiempos de intervención de los grupos parlamentarios en el Pleno de la próxima semana, dado que Pedro Sánchez comparecerá para hablar de tres asuntos a la vez: Gibraltar, Palestina y Begoña Gómez, y lo hará sin límite de tiempo. De esta forma, los partidos pasarían de tener 15 minutos de intervención más 5 de réplica, a tener 45 minutos más 15.
El PP teme que las intenciones del presidente sean escabullirse, una vez más, de dar explicaciones mientras vende la idea de que ya ha hablado de la corrupción que le afecta. En el partido de Feijóo siguen guardándose la carta de llamarle a comparecer en el Senado y en la comisión de investigación del caso Koldo, en previsión de que Sánchez no dé explicaciones el próximo miércoles sobre los asuntos que afectan a su mujer y al Gobierno.