El grupo de Junts per Catalunya (JxCat) en el Congreso de los Diputados pretende que el Gobierno de España y el de Canarias acepten una disposición adicional en la modificación de la Ley de Extranjería para evitar que Cataluña sea incluida en el reparto y acogida de los inmigrantes menores no acompañados, los conocidos como menas.
La pretensión de Junts se basa en que fruto del acuerdo de Bruselas (el firmado el 9 de noviembre en Bruselas entre el PSOE y Junts) el partido de Puigdemont negocia con el Ejecutivo de Sánchez la cesión a la comunidad autónoma catalana de las competencias en materia de inmigración, según informa el digital The Objective. La Generalidad catalana, en manos de ERC, asegura que en los tres primeros meses de este año han llegado a Cataluña 981 menas, una cifra, alegan, a la que no pueden hacer frente con los recursos propios.
La intención de Junts es que la Generalidad ejerza de forma integral las competencias en materia de Extranjería y ese es uno de los puntos calientes de las diversas carpetas que tienen abiertas con el Ejecutivo en unas negociaciones que se llevan a cabo en el extranjero. En el Gobierno matizan que la negociación no es para el traspaso de las competencias sino para su cesión, medida que podría quedar en agua de borrajas si finalmente el socialista Salvador Illa consigue ser investido presidente de la Generalidad.
Con sus pretensiones, Junts pone en tela de juicio el reparto de menas entre las comunidades autónomas. En la actualidad, Canarias acoge a más de seis menores no acompañados en los ochenta centros de que dispone en el archipiélago. El número de menas en España se calcula en torno a los 13.200 y la intención de los ejecutivos central y canario es trasladar a parte de esos menores a la península.