El Partido Popular ha confirmado que no llamará a Begoña Gómez a la comisión de investigación del Senado, dado que la mujer de Pedro Sánchez "debe dar cuenta de sus negocios ante el juez". "Nosotros a quien hacemos oposición es a Sánchez", ha dicho el portavoz del partido, Borja Sémper, defendiendo que "nadie puede esperar que llamemos a Begoña Gómez al Senado".
El presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, se había mostrado reacio a esta posibilidad al asegurar que "no es su estilo", aunque nunca cerró por completo la puerta a incluirla en el listado de comparecientes en el que sí aparece el presidente del Gobierno. En este arranque del curso político, y tras reunir por primera vez al comité de dirección del PP tras el verano, el PP confirma su negativa a llamarla a declarar.
"A quien pedimos cuentas de para qué se utiliza La Moncloa y cuál ha sido el papel del presidente en negocios de terceros es a Sánchez", ha defendido Sémper al ser preguntado por los periodistas en una rueda de prensa desde la sede del partido en Madrid. En su opinión, su labor es exigir responsabilidades políticas y quien debe asumirlas es el presidente, no su mujer. El PP no ha fijado todavía una fecha para la comparecencia de Sánchez en el Senado.
Sémper ha denunciado que el cerco de corrupción que rodea a Sánchez es cada vez más estrecho, recordando que el propio Gobierno reconoció el pasado viernes en el Senado la existencia de una trama para lucrarse con la compra de mascarillas durante la pandemia. Hechos que, para el PP, arrojan más sospechas sobre la actuación de la presidenta de las Cortes, Francina Armengol, durante su etapa en Balares, sobre el ministro Ángel Víctor Torres por su etapa en Canarias o sobre el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Y es que el ministro de Transportes, Óscar Puente, la semana pasada cesó a dos altos cargos de su departamento imputados en la causa, confirmando que la auditoría realizada provocó su "pérdida de confianza" en ellos. Una forma de admitir la corrupción en la etapa de su antecesor, José Luis Ábalos, mano derecha entonces de Pedro Sánchez. A este caso se suma también el del hermano de Pedro Sánchez, investigado por posible enchufismo y evasión fiscal.