A pesar de no estar presente, Isabel Díaz Ayuso se ha convertido en protagonista de la sesión de control al Gobierno en el Congreso, muy descafeinada por la ausencia de Pedro Sánchez, de viaje oficial a Portugal, y la mitad de los ministros. Los pocos asistentes han utilizado a la presidenta de Madrid de parapeto para escabullirse de dar explicaciones sobre la catarata de escándalos de corrupción que les acechan.
El Partido Popular se ha cobrado la revancha de la semana pasada, cuando no le permitieron cambiar las preguntas de la sesión para centrarlas en la corrupción, y ha formulado este miércoles una decena de cuestiones sobre este asunto, sin lograr una sola explicación de los implicados, entre ellos la vicepresidenta, María Jesús Montero, y el ministro de Justicia, Félix Bolaños, que se han dedicado a atacar a Ayuso utilizando a su pareja.
"¿Acaso la jefa que les come la tostada?, ¿esa presidenta ejemplar que, con un ciudadano ejemplar, se va de vacaciones a costa de los contribuyentes españoles y madrileños?", respondía el también ministro de la Presidencia al portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, que le interpelaba a cuenta de los lingotes de oro investigados en la trama. "La jefa que se comió la tostada se llama Begoña Gómez y lo hacía en la Moncloa contra el presupuesto del Estado", le recordaba en su turno de réplica Tellado.
Las excusas del Gobierno
En su rifirrafe con Cayetana Álvarez de Toledo, que le preguntaba por la imputación del fiscal general, Álvaro García Ortiz, al frente todavía del Ministerio Público, Bolaños empleaba la misma estrategia: "El fiscal general del Estado lo que hace es perseguir el delito, ¿usted con quién está? ¿Con un ciudadano ejemplar que defrauda 350.000 euros a la Hacienda pública o con el fiscal que le persigue?", decía en referencia a la pareja de Ayuso, Alberto González Amador.
La diputada del PP le recordaba que García Ortiz está imputado por desvelar información privilegiada, no por perseguir bulos como asegura el Ejecutivo, y apelaba a la presunción de inocencia, durante su turno de réplica, sin obtener ninguna respuesta a las preguntas lanzadas al ministro. En su lugar, Bolaños recurría, incluso, al 11-M para acusarla de lanzar bulos.
También Montero optaba por atacar a Ayuso al ser preguntada por la popular Carmen Fúnez sobre el rescate de Air Europa. "No le tienen respeto a lo institucional hasta el punto de que una presidenta de la Comunidad de Madrid, en un hecho sin precedentes, a una cita con el presidente del Gobierno", decía la vicepresidenta, que acusaba al PP de "insumisión institucional", llegando a exigirle que "respeten las instituciones, la democracia y al Gobierno legítimo". Todo ello, apenas horas después de tomar la penúltima institución del Estado, RTVE, después de hacer lo propio con el CIS, el CNI, el TC o el Banco de España.