
El diputado de Vox y portavoz en el Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith, ha pedido al partido que no adopte sin filtro todas las políticas de Donald Trump. Sus palabras se producen después de que la dirección nacional mostrara una postura ambigua al no criticar de forma tajante los recientes ataques del expresidente de Estados Unidos al presidente ucraniano Volodímir Zelenski, al que tachó de "dictador".
"No tenemos que comprar todas las políticas de Trump", España debe tener la libertad de "criticar todo lo que haga Trump que perjudique" al país o que "perjudique al concepto que tenemos de Europa", ha afirmado Ortega Smith en una entrevista en Onda Madrid. Unas palabras que llegan en un momento clave para Vox que se enfrenta a presiones internas por su viraje en torno a sus estrategias políticas.
Distanciándose de la línea marcada por la dirección nacional, las declaraciones de Ortega Smith llegan tras el goteo de bajas de figuras clave en Vox, la última la de Agustín Rosety, exdiputado y exportavoz del Grupo Parlamentario en la Comisión de Defensa, descontento con el giro que está tomando el partido en su política internacional. Ortega Smith ha expresado su pesar por la pérdida de capital humano en la formación, aunque ha mostrado un sentir más profundo por la salida, en agosto de 2023, del exportavoz parlamentario Iván Espinosa de los Monteros.
"Me da mucha pena no tenerle al lado", ha confesado el miembro del Comité Ejecutivo Nacional, que ha destacado el trabajo realizado por uno de los fundadores de Vox en sus primeros años, cuando "no había nada". De este modo, Ortega Smith ha lanzado una crítica implícita hacia los actuales dirigentes de Vox, aquellos que han llegado al partido con un cargo ya asignado.
En todo caso, ha descartado la posibilidad de abandonar Vox pese a reconocer "haberse sentido traicionado y engañado" en algunas ocasiones, sin detallar de manera explícita a qué circunstancias se refería. Eso si, ha reconocido discrepancias con la dirección nacional en algunos temas asegurando que él no forma parte de la cultura de la sumisión. "La lealtad no consiste en aplaudir como palmeros a quienes tienes al frente de un proyecto sino decirles las cosas y llamarle al pan, pan y al vino, vino", ha aseverado Ortega Smith que ya avisó de que Vox no podía convertirse "en una agencia de colocación", en lo que fue una crítica hacia ciertos nombramientos dentro del partido. Estas declaraciones precedieron a su intento de impulsar un movimiento crítico dentro de Vox, con la intención de disputar la presidencia del partido.
Ortega Smith ha reconocido que en Vox se han tomado decisiones que no han sido acertadas y ha expresado su malestar por el rumbo que está tomando la formación. A pesar de sus críticas internas, ha asegurado que su permanencia en el partido se debe al apoyo de las personas que han confiado en el proyecto, reiterando su compromiso con los principios fundacionales de Vox.