
La delegación europea de Vox liderada por Jorge Buxadé ha votado en consonancia con su Grupo Parlamentario, Patriotas por Europa, que se encuentra comandado por el presidente húngaro, Víktor Orbán, pese a que la formación tiene como presidente a Santiago Abascal; en contra del plan de rearme que ha propuesto la Unión Europea. Este voto de rechazo ha sido el mismo que han emitido los grupos parlamentarios de la mayor parte de lo socios de investidura de Pedro Sánchez como los separatistas EH Bildu y ERC o las formaciones de extrema izquierda Podemos y Sumar.
Aún así, el Parlamento Europeo ha aprobado la medida con 419 votos a favor, 246 en contra y 46 abstenciones gracias al voto favorable del Partido Popular Europeo –en el que se encuentran enmarcados los de Alberto Núñez Feijóo—, los socialistas europeos, los verdes, liberales y conservadores; es decir los socios que tienen mayoría en la Eurocámara.
En este sentido, se ha aprobado la resolución por la que la Unión Europea insta a sus gobiernos a incrementar su gasto y atención en Defensa, de forma que los estados miembro de la UE tomen medidas concretas en el campo industrial que incumbe al ámbito militar y realicen acciones "similares a las que se emplean en tiempos de guerra".
Este respaldo al rearme de los gobiernos europeos se da en un contexto en el que los socios del presidente del Gobierno en el Congreso no quieren apoyar la subida del gasto en Defensa hasta el 2% del PIB, comenzando con su socio en el Consejo de Ministros, Sumar; que se ha mostrado en contra de la medida. Algo que ha obligado al líder de los socialistas a iniciar una ronda de contactos en busca de apoyos parlamentarios de otras formaciones políticas, como la liderada por Feijóo.
Reducir la dependencia de terceros
La medida tiene como objetivo, además de adaptarse al contexto bélico en el que se encuentra el continente, deshacerse de la dependencia de países que no son considerados socios en materia de Defensa, vinculándose aún más con los que sí lo son. Así, se pretende apostar por el desarrollo de una industria autóctona priorizando la compra conjunta de armamento militar. Todo ello, para llegar a los objetivos de seguridad que ha planteado la Comisión de Úrsula Von der Leyen, que están marcados por la amenaza que supone la escalada bélica en torno a la invasión que Rusia ha llevado a cabo en Ucrania.
Sin embargo, el grupo parlamentario en el que se encuentran enmarcados los de Abascal ha votado en contra de la medida; al igual que se han pronunciado en contra los representantes de los partidos separatistas, entre los que también se encontraba el Bloque Nacionalista Gallego (BNG). Por el contrario, el PNV ha votado a favor del rearme militar.