Este sábado miles de personas por todo el territorio nacional han salido a las calles para solicitar a los gobierno autonómicos, y también al gobierno central de Pedro Sánchez, medidas en materia de vivienda, especialmente por una bajada generalizada del precio del alquiler y han advertido la posibilidad de llevar a cabo una huelga de alquileres para lograr sus objetivos.
Asociaciones, entidades y sindicatos relacionadas con la vivienda, y respaldados por CCOO y UGT, han convocado manifestaciones en más de 40 ciudades españolas, en la que pretenden exigir, entre otras cosas, una bajada del 50% en los alquileres y acabar con lo que denominan el "chollo" de los rentistas.
La marcha en Madrid ha comenzado a las 12.00 del mediodía desde Atocha y ha finalizado en la Plaza de España, respaldada, ente otros, por el sindicato de inquilinos de Madrid, en la que culpan a los arrendadores del aumento en los precios del alquiler y también a los diferentes gobierno por la falta de medidas para paliar dicha subida. La marcha en la capital ha contado con la asistencia de la ministra de Juventud e Infancia del Gobierno, Sira Rego.
Manifestación con peticiones contradictorias
En las marchas de todo el país se han escuchado mensajes cruzados en contra de los gobiernos autonómicos y también en contra del gobierno central de Pedro Sánchez.
"Acabemos con el negocio de la vivienda" es el lema elegido por las organizaciones convocantes de la manifestación en la se han escuchado cánticos en contra de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y contra el presidente Pedro Sánchez: "Sánchez, dime que se siente, pensábamos que eras Superman, ahora desahucias familias, nunca lo vamos a olvidar", se ha escuchado por el centro de la capital.
Las medidas solicitadas por los convocantes van desde esa bajada del alquiler del 50%, anteriormente citada, hasta la recuperación de inmuebles vacíos, turísticos y de alquiler temporal para los vecinos, un alquiler indefinido y una huelga en el pago de la renta, es decir, dejar de pagar. Una medida que podría fomentar un aumento del problema de la okupación y sin embargo, también solicitan la desarticulación de grupos de desokupación.
"Decretamos los alquileres indefinidos, se acabó marcharnos de nuestros barrios, de nuestras casas, o incluso de nuestras ciudades cada cinco o siete años", ha dicho Valeria Racu, portavoz del sindicato de inquilinos de Madrid, en declaraciones a los medios en el inicio de la manifestación. Una medida bastante vetusta que nada tiene de novedosa.
La norma de los "alquileres indefinidos" ya estuvo instaurada en nuestro país y fue en 1954 cuando Francisco Franco y sus ministro promulgaron la Ley de Viviendas de Renta Limitada y la Ley de Arrendamientos Urbanos de 1964. Una medida que quiere apropiarse ahora la izquierda.
Y otro asunto es la okupación. Lejos de pedir medidas que endurezcan la respuesta legislativa contra el delito de okupación o la celeridad de los alzamientos, los sindicatos y asociaciones están pidiendo no pagar el alquiler y "resistir".
"Se acabó marcharnos de nuestras ciudades cada cinco o siete años. Basta de desahucios invisibles. Llamamos al medio millón de hogares, cuyos contratos acaban este 2025, a quedarse en casa y resistir. Proclamamos el derecho a la huelga de alquileres. Las huelgas de alquileres han venido para quedarse", ha señalado la portavoz, Valeria Racu.
Medidas que han defendido y apoyado partidos como Sumar, Podemos e Izquierda Unida, su coordinador federal, Antonio Maíllo, ha defendido este sábado "la intervención pública en la política de vivienda" desde Málaga y ha advertido de que "la política de vivienda dejada en manos privadas ha sido un fracaso".