Moncloa ultima los detalles de su programa militar que Sánchez pretende anunciar antes del verano. Desde hace meses, Defensa está coordinando las labores con "ingentes inversiones estratégicas" para rearmar el ejército español. La idea del Gobierno es la reindustrializar de nuevo algunas zonas afectadas por las reconversiones industriales o la descarbonización.
Parte del plan lo adelantó hace unas semanas la secretaria de Estado, Amparo Valcarce, en una comparecencia ante la comisión de Defensa donde prometió inversiones "en todo el país pero, sobre todo, en comarcas afectadas" que "deberán reconvertirse" como es el caso de "Asturias y Linares". Fuentes del Ejecutivo recalcan que muchas de estas inversiones serán a diez años vista, aconsejada por altos cargos del ejército en función de sus necesidades, y adelantan algunas de las que se conocerán.
Una de las más ambiciosas pasa por Linares. La localidad jienense lleva años afectada por el cierre de varias empresas, aunque la más importante era la de Santana Motor. Esto le ha llevado a encabezar las listas de paro en Andalucía e, incluso durante varios años, fue la ciudad española con más desempleo. Ahora, el Gobierno pretende que la producción de drones del ejército se sitúe en esta localidad según admiten las mismas fuentes.
En el socialismo jienense, uno de los más numerosos dentro del PSOE Andaluz, aseguran que las inversiones en defensa están llegando desde hace tiempo y ponen como otro ejemplo la fábrica de vehículos militares EM&M con los que se pretende recuperar la industria del motor en esta localidad.
Otra de las más potentes se situará en Cartagena. Se trata de las localidades más afectadas, durante las últimas décadas por la decadencia del sector naval, y que ahora verá como se construirán submarinos militares. Además de tratar de impulsar los astilleros locales, las inversiones serán un guiño a la localidad natal de Isaac Peral, inventor del submarino.
También se espera que Navantia en Cádiz reciba nuevos encargos. Lo que ayudaría a superar la incertidumbre del sector naval en una de las provincias con más paro de España. En el Ejecutivo recalcan que "todas las provincias tendrá inversiones" pero es cierto que hay unas que se verán más beneficiadas que otras.
En el caso de Asturias, además de la reconversión industrial, se une el cierre de la minería. A falta de desvelar las inversiones en las Cuencas Mineras, que serán las más importantes en esta comunidad, Defensa ya está trabajando para ayudar a otras localidades.
En el caso de Gijón, la empresa semi-pública Indra ha comprado el Tallerón, perteneciente a Duro Felguera, una empresa que atraviesa grandes dificultades económicas. El objetivo es salvar los 150 empleos de esta fábrica para reconvertirla a la fabricación de blindados. También Indra ha mostrado su interés en adquirir la Fábrica de Armas de Trubia pertenece a General Dynamics,
Inversiones en antiguos feudos
La lluvia de inversiones, además de recuperar localidades, también impulsará a feudos "obreros" donde el PSOE tuvo una cómoda mayoría hasta hace años. En el caso de Linares, los socialistas tuvieron cómodas mayorías durante décadas aunque en la actualidad gobierna el PP. El PSOE todavía resiste en la Diputación. No es así el caso de Cádiz donde los socialistas perdieron el bastón de mando de esta institución en 2023 y pasó a manos del PP.
Las Cuencas Mineras asturianas, la izquierda siguen resistiendo todavía con cómodas mayorías para los alcaldes de PSOE o IU como sucede en Langreo o Mieres. En el caso de las grandes ciudades, ambas están en manos de la derecha, Oviedo (PP) y Gijón (Foro Asturias). En la actualidad, la minería está causando un grave problema para el presidente autonómico, Adrián Barbón, al desvelarse que en la mina de Cerredo (Degaña) se estaba extrayendo carbón de manera ilegal Un hallazgo que se ha producido tras un accidente por una explosión de grisú y que le costó la vida a cinco leoneses,
Tras el escándalo, ha dimitido la consejera de Transición Ecológica, Belarmina Díaz, y Barbón ha hecho una remodelación de Gobierno para fusionar estas competencias con las de Movilidad y las de Industria con las de Ciencia.
Estas inversiones llegan también tras una legislatura llena de cesiones al independentismo catalán y una cierta sensación de abandono en gran parte de España. Esto se ha traducido en una bajada de la intención del voto del PSOE pero, en especial, de Sumar. La frustración por la gestión del Gobierno unida a las malas perspectivas económicas en esta localidades pueden ser un combo mortal para la izquierda que ahora Pedro Sánchez quiere desactivar.