
Alguno de los ministros que durante el apagón estuvieron en la sede de Red Eléctrica admiten que dilucidar las causas del cero energético se asemeja mucho a indagar un accidente de avión. Lo primero es encontrar la caja negra y más tarde analizarla para ver qué sucedió en los momentos previos al cero energético.
El problema para el Gobierno es que, de momento, nadie admite que en sus instalaciones sucediese un incidente que llevase a la península ibérica a un apagón Es decir: nadie tiene una caja negra. Ni en la sede, ni en las instalaciones de Red Eléctrica ni tampoco en las empresas energéticas.
"Nadie ha detectado una anomalía", asumen en el Gobierno. "Cuando te reúnes con las empresas a ninguna le ha pasado nada", tercian fuentes conocedoras de la investigación, antes de insinuar que quizás esta negativa se debe a que no quieren asumir las indemnizaciones millonarias que se verían obligadas a asumir si se prueba que el apagón se produjo a una avería en sus instalaciones.
Existe un precedentes de este tipo. En 2007, por tres días sin luz en Barcelona, Red Eléctrica y Endesa tuvieron que pagar más de 20 millones de euros a 300.000 afectados. Ahora, tras el apagón en la península, los primeros cálculos de la patronal CEOE cifraban ya la semana pasada en 1.400 millones de euros las pérdidas ocasionadas, el equivalente al 0,1% del PIB anual español.
¿Un informe concluyente?
En el Ejecutivo se escudan en que nadie asume que el apagón se produjo en sus instalaciones y en la cantidad de millones de datos que tienen que analizar para no hilvanar una respuesta cuando se le pregunta por las causas. Sólo se sabe que tardarán "tiempo" en dilucidarlo. El informe que exige Europa tardará tres meses y y hay quien augura que puede ser más "un análisis de lo que sucedió ese día" que "una causa concreta".
Otras fuentes tercian que puede ser multicausal y ,haciendo un paralelismo con un fallecimiento, aseguran que una enfermedad puede deberse a varias causas. En lo que coinciden varias fuentes es que el informe no tiene porque ser concluyente. Más tarde habrá un segundo análisis. La Comisión Europea, una vez que tenga este informe, creará una investigación con expertos que no sean ni españoles, ni portugueses, ni franceses, lo que puede demorar la investigación durante seis meses.
En el Ejecutivo siguen descartando los informes y alertas previas de Red Eléctrica, que alertaban de la entrada masiva de energías renovables, o de otros organismos como la Agencia Internacional de la Energía que pedía complementar a la eólica y solar con un mix energético para garantizar la estabilidad del consumo.
Es más, aseguran que el objetivo sigue siendo de tener un 100% de renovables en 2050 aunque, hasta esa fecha, "Dios proveerá" y no se cierran a alterar el calendario de cierre de las nucleares si lo piden las energéticas. Algo complejo después de la arremetida de Sánchez contra la fusión nuclear.