Aurland, el típico pueblo noruego en mitad de un fiordo y con un impresionante mirador
En un recóndito lugar del interior de Noruega, se abre un corto trayecto (con algunos de sus tramos cerrados durante el invierno) que contiene uno de los miradores más reconocibles de Noruega, el de Stegastein, situado en el fiordo de Aurland, que forma parte del fiordo de Sogn, uno de los más grandes de la costa oeste del país nórdico y del mundo. Todo un espectáculo natural que muestra la belleza y la magnitud de la obra del agua y la erosión. Entre los atractivos principales de Aurland se encuentra el fiordo de Naeroy, este último nombrado patrimonio mundial por la Unesco. Estos forman los brazos del sur del fiordo de Sogn, que mide 204 kilómetros de longitud y es el más largo y profundo de Noruega
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Por encima del fiordo de Aurland, sobre el pueblo con el mismo nombre, se descubre un paisaje de fiordos impresionante, alrededor y por debajo del destacado mirador de Stegastein. La galardonada estructura de Stegastein es una atracción por derecho propio.
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El mirador de Stegastein, es una de las visitas obligadas en Aurland. La impresionante plataforma de madera y cristal está ubicada a una altitud de 650 metros sobre el nivel del mar. En verano, un autobus tiene varias salidas desde Flåm y Aurland.
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Una vista general del fiordo de Aurland, desde el mirador de Stegastein, con el pueblo de Aurland en primer término, es el canal por el que navegaban los barcos vikingos en su época.
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Unas vistas más memorables de toda Noruega se encuentra desde el mirador de Stegastein, en la carretera de montaña entre Aurland y Lærdal, formando parte de las Carreteras Turísticas Nacionales de Noruega.
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Dos turistas admiran la panorámica desde el mirador.
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El valle de Aurland tiene 40 km de largo y se utilizó durante mucho tiempo como carretera de carruajes para mercancías y ganado por los granjeros locales en su ruta hacia los mercados del este de Noruega.
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El jardín exterior de una casa típica noruega donde predomina la madera y el estilo nórdico.
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En la localidad de Aurland, todavía algunos de sus vecinos trabajan en la pesca. En la fotografía varios peces que se han salado para secar al sol.
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En Aurland y Flåm, se encuentran muchas atracciones y actividades, como La fábrica de calzado de Aurland, el Tren de Flåm, el histórico hotel Fretheim o poder navegar por el fiordo de Nærøy, Patrimonio de la Humanidad.
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La iglesia del pueblo, rodeada por su pequeño cementerio.
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Este pintoresco valle que va de las montañas hacia el fiordo es visitado por muchos senderistas que esperan experimentar la salvaje belleza del oeste de Noruega.
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Pasar una noche en Aurland, en el mismo corazón de los fiordos noruegos, es una de esas experiencias que se recuerdan para toda la vida. El silencio de este lugar es inigualable. Si está despejado y es la época se puede ver un cielo estrellado libre de contaminación lumínica y alguna aurora boreal.
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Una hilera de casas adosadas edificadas a pocos metros de la orilla del agua, en el fiordo de Aurland. La paz, el silencio y la tranquilidad, un bien de lujo en otras latitudes, aquí es muy abundante. El estilo nórdico es esto.
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La zona oeste de Noruega está repleta de fiordos grandes y pequeños. El de Aurland conecta con el gran fiordo de Sogn, Sognfjord en noruego, considerado uno de los más largos del mundo y Patrimonio de la Humanidad.
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Otra estampa más de la belleza de los fiordos noruegos, desde un barco turístico de tamaño medio, especializado en cruceros por los fiordos del interior. Obsérvese cómo los ríos y cascadas desembocan en el canal que hace 1.000 años era navegado por los intrépidos vikingos y sus pequeños pero rápidos barcos.
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