Son Pedro Sánchez y Albert Rivera quienes deberán deponer ambiciones y vetos para que haya una Moncloa fuerte, cohesionada y avalada por el voto de la mayoría.
¿Por qué no permitimos que cada persona conforme su propia 'hucha' de pensiones, y que ésta sea administrada según los intereses y necesidades de su propietario?
La obsesión de la izquierda con la Iglesia Católica y su silencio cobarde y cómplice con homofobias asesinas en determinados países islámicos esa indignante.