Pasqual Maragall ha conseguido finalmente que el partido cree una vicepresidencia, que recaerá en manos de Manuela de Madre, en la que poder delegar algunas de sus funciones como presidente del partido. Además, la nueva ejecutiva recupera al dirigente socialista
Josep Maria Sala, que la abandonó en 1997 tras ser condenado por el caso Filesa.