La vicepresidenta del Gobierno no dudó en lucir los trajes tradicionales durante su gira africana. Hasta se fotografió
en Maputo con la típica cesta de anacardos. Sin embargo, en su visita a la Santa Sede de este fin de semana optó por ir más a su aire. Cuando el protocolo marcaba velo negro, De la Vega lo solucionó con un breve tocado. Cuando se advierte de no vestir colores "blanco, rojo o fucsia", la vicepresidenta elige, dentro de su
extenso guardarropa, precisamente una prenda con los colores cardenalicios. El secretario de Estado, Angelo Sodano, no pudo resistir un comentario: "Viene usted con color de cardenal".