El Gobierno no ha querido aprovechar la nueva situación en Cuba, después de que Fidel Castro haya delegado provisionalmente el poder en su hermano Raúl por enfermedad, para exigir la democracia en la isla. Zapatero, Moratinos y De la Vega se han limitado a desear al dictador una "pronta recuperación", en la misma línea que IU y ETA-Batasuna. Al presidente del Gobierno le parece "poco respetuoso" hacer una valoración política en este momento. Sólo el PP ha pedido la libertad para el pueblo cubano y ha condenado todas las dictaduras. Mientras en Miami celebraban el posible fin de la dictadura, la disidencia se muestra cautelosa. EEUU ha prometido ayuda económica y política a los cubanos si inician una transición a la democracia.

El brazo político de ETA advirtió este martes que no habrá cambios ni de actitud, ni de nombre ni de dirigentes. El coportavoz de los proetarras, Pernando Barrena, aseguró que no tienen intención de cambiar ni de "nombre" ni de "dirigentes" para buscar la legalidad, que está, a su juicio, "en manos del PSOE". Además, justificó la actitud desafiante de "Txapote", asesino, entre otros, de Miguel Ángel Blanco, asegurando que durante los juicios lo único que hizo fue una "reivindicación de su lucha como militante de ETA".