La Fiscalía de la Audiencia Nacional remitió este viernes un informe al juez Pedraz en el que se asegura que ni los carteles de Batasuna-ETA convocando a la marcha ni la rueda de prensa de Permach y Álvarez llamando a la misma demuestran que exista vinculación alguna entre los ilegalizados y la marcha proetarra. En el primero de los casos porque "podría tratarse de una iniciativa personal" y en el segundo, a pesar de que esa presencia bastaría para ilegalizar una candidatura en unos elecciones. De este modo, pide que se rechace el recurso presentado por Dignidad y Justicia, que recuerda en su escrito que para Garzón fueron "indicios claros de voluntad delictiva".

El portavoz de la Junta Islámica ha declarado que desconoce el origen de la orden de asesinato contra Gustavo de Arístegui, publicada por una web saudí utilizada por terroristas islamistas para comunicarse entre sí. Yusuf Fernández, cuya acusación de "islamofobia" lanzada contra el diputado del PP en la web de la Junta Islámica de España desencadenó la sentencia de muerte yihadista, remarca ahora que se solidariza con él. Gustavo de Arístegui se reafirma en hacer responsable a Fernández de lo que pueda ocurrirle: "Cuando se lanza una acusación sin fundamento desde una página que va a ser leída por miles de personas es evidente que se está poniendo a rodar una pelota de odio que tiene estas consecuencias", ha dicho a Libertad Digital.

Las participantes en el blog de Luis del Pino han encontrado unas interesantes declaraciones del Secretario de Libertades del PSOE, Álvaro Cuesta, en El Plural. En respuesta a la reacción de Alicia Castro sobre el tercer grado concedido a Rafael Vera, el socialista sale al paso para negar que el ex secretario de Estado de Seguridad tenga algo que ver con el 11-M. Aunque la popular Alicia Castro no había hecho más que constatar que la relación entre Rubalcaba –artífice de la excarcelación– y Vera siempre ha sido fluida y que el ministro reconoció en la Comisión de Investigación haberse reunido con él el día 11 de marzo, la airada reacción de Álvaro Cuesta aporta un dato sorprendente que le hace caer en una contradicción.