La secretaria ejecutiva de Política Social y Bienestar del PP ha afirmado este domingo que la crisis del Marine I empezó cuando intervino el Gobierno de Rodríguez Zapatero, aunque el PSOE presume de dilegentes. "Hace más de diez días, un barco negrero estaba surcando las aguas del Atlántico, y en esto intervino el Gobierno, y a partir de ahí empezó el caos", ha indicado Ana Pastor, a la vez que ha manifestado que si no fuera por la gravedad de los hechos, "pensaríamos que estamos viviendo un sainete", ya que a la situación de los inmigrantes se une la de los policías españoles enviados a Mauritania, donde, a su parecer, han "soportado condiciones lamentables". Al contrario: De La Vega justificó este viernes las penurias de la Policía española.

Los cuatro tripulantes evacuados del buque holandés Ostedijk han recibido el alta en el hospital Juan Canalejo (La Coruña) tras ser atendidos y comprobar que su estado es aceptable, sólo presentan irritación en los ojos y en las vías respiratorias. Las personas, ingresadas por vómitos, son de origen filipino y tiene entre 30 y 35 años. El próximo destino de la tripulación podría ser la Casa del Mar (La Coruña), ya que es lo más habitual en estos casos. La carga del Ostedjik ardió cerca de La Coruña provocando una reacción química y, para evitar que "los gases tóxicos" llegasen a la ciudad, fue remolcado a alta mar. Mientras, sigue la polémica con el Sierra Nava (Algecirss) y el Mistral Express (Melilla).

La chirigota Los polluelo con pelos en los güevos, acusada de racismo en 2006 por atentar en sus letras contra el colectivo musulmán, negó durante la madrugada de este domingo tener tintes racistas y denunció la decisión de retirarles el primer premio conseguido en el concurso. Los once integrantes de la agrupación aparecieron en el escenario con una ampliación de fondo del diario ABC donde se recogían las denuncias contra la chirigota por "racismo", aunque esta palabra aparecía borrada del titular. "Yo no soy un racista" fue lo primero que cantaron y sentados en una sala de vistas vestidos de presos dejaron claro que "la libertad está para algo". El público mostró su apoyo a la chirigota y otras comparsas hicieron alusión a la libertad de expresión y a la condena de la censura.